La presión del inflado de los neumáticos es una característica de suma importancia a la cual es necesaria prestar especial atención, ya que, aunque no lo parezca, que esta sea correcta garantiza el adecuado funcionamiento del coche en general. Si la presión de los neumáticos de un coche es excesiva o defectuosa, tendrá consecuencias negativas en el rendimiento del vehículo que pueden incluso llegar a ser peligrosas, por lo que debe procurarse que la presión de los neumáticos sea la correcta, pero claro está que diferentes neumáticos de diferentes tamaños y características requieren una presión distinta, y es allí en donde entra en especial rigor el uso de las llamadas tablas de presión de neumáticos. Si es de tu interés conocer un poco más acerca de qué son las tablas de presión de neumáticos, para qué sirven y qué puede llegar a pasar si haces caso omiso de ellas, te invitamos a que continúes leyendo este artículo.
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¿Qué es una tabla de presión de neumáticos?
Para los usuarios comunes, puede resultar algo complicado saber con certeza si los neumáticos de su coche tienen la presión correcta, o si cuentan con algún defecto del que deban percatarse, hacerse cargo y corregir, de manera que entra en utilidad la tabla de presión de neumáticos, la cual consiste en un indicador que especifica la presión que deben tener los neumáticos para determinado vehículo en particular. La tabla de presión de neumáticos suele presentarse en forma de una pegatina ubicada en alguna parte del vehículo, habitualmente en la tapa de combustible, el lateral de alguna de las puertas, o el parasol del copiloto, para que sea accesible y pueda visualizarse con facilidad su contenido.
¿Para qué sirve la tabla de presión de neumáticos?
La tabla de presión de neumáticos es una herramienta de suma importancia que sirve para permitir a los usuarios conocer la presión adecuada que deben tener sus neumáticos para funcionar y rendir correctamente, tal que se eviten problemas relacionados con desgaste prematuro de los neumáticos y averías que pongan en riesgo la integridad y seguridad del vehículo y de quienes lo abordan. Gracias a la tabla de presión de los neumáticos, los dueños de vehículos y los especialistas, técnicos o mecánicos en los talleres de coches pueden saber cuándo es hora de ajustar la presión de los neumáticos y cuál es la presión apta o idónea a la que debería ajustarse.
Cada neumático cuenta con una tabla de presión
Por regla general, se dice que la presión de los neumáticos correcta ronda en los 2.5 bares, pero, sin embargo, esto no es absoluto, ya que lo cierto es que cada coche y cada neumático de marcas, tamaños y características diferentes, tendrán también una presión ideal distinta, tal y como se puede visualizar en las tablas de presión de neumático que traen los vehículos por defecto, de manera que, considerando también si el coche será utilizado para conducción normal o como vehículo de carga, la presión de sus neumáticos en particular variará, y también lo hará la frecuencia con la que se han de llevar para ser ajustados nuevamente a la presión correcta.
¿Qué ocurre si pones una presión inadecuada?
El que los neumáticos de un vehículo tengan una presión inadecuada trae consigo una variedad de problemas y fallas, ya sea porque la presión esté por encima o por debajo de los niveles recomendados o indicados por la tabla de presión de neumáticos del vehículo en cuestión. A continuación, te contaremos algunas de las consecuencias que pueden llegar a ocurrir si pones una presión inadecuada a tus neumáticos.
Gastarás más combustible
Si la presión del neumático es inadecuada, particularmente si esta es muy baja, trae como resultado una baja, presión sobre la resistencia a la rodadura y, por ende, el vehículo deberá realizar un mayor esfuerzo para poder moverse, lo que causa un mayor consumo de combustible, de hecho, una presión de inflado inferior a la recomendada puede significar un gasto de combustible 6% o hasta 25% mayor al que se debería tener, lo cual, a la larga, tomando en cuenta los elevados costos del combustible, puede resultar en un gasto monetario bastante incómodo. Conducir un coche cuyos neumáticos tienen una presión de inflado oportuna no solo lo hace más seguro, sino que además te ahorrará unos cuantos euros en combustible.
Te arriesgas a que estallen
Un neumático con una presión de inflado inadecuada, inferior a la que debería tener, se desgasta con mayor velocidad que uno con una presión correcta, además de calentarse a niveles mucho más altos más rápidamente, lo cual, entonces, lo hace especialmente vulnerable a sufrir estallidos o reventones, ya que se deforman, abollan, flaquean y falsean con mucha más facilidad, mientras que, por otra parte, si la presión del neumático es mayor a la que debería tener, también se corre riesgo de estallido, ya que no flexionar de forma normal para absorber las irregularidades que pudiera llegar a tener el terreno por el que transita, tal que una de estas irregularidades puede ser causante de una rotura total de la llanta. Ciertamente, ya sea que los neumáticos tengan una presión mayor o menor a la recomendada, el riesgo de estallido es considerablemente alto, lo que supone entonces otra larga lista de problemáticas y fallas cuyas reparaciones tienden a ser bastante costosas.
Riesgo de accidente
Está claro que un vehículo cuyos neumáticos tengan una presión de inflado incorrecta es significativamente más peligroso que uno cuyos neumáticos tengan una presión de inflado correcta, pues, además de las posibles afectaciones y riesgos que te hemos venido comentando con anterioridad, se suman muchos otros como resultado de factores justamente relacionados a las fallas en el rendimiento que debería tener un componente tan importante para todo vehículo como lo son los neumáticos, poniéndolo en riesgo de accidente y, por ende, comprometiendo la integridad física no solo del vehículo como tal, sino también de los otros coches que puedan estar en su proximidad y las personas que los abordan.
Sin duda alguna, garantizar la seguridad de un coche es una prioridad para todo usuario, y asegurarse de que los neumáticos tengan una presión de inflado acertada es una de las tantas cosas que se pueden hacer para disminuir el riesgo de accidentes.