El motor de un vehículo se compone de diferentes piezas metálicas las cuales continuamente produce fricción, debido a esto es necesario un aditamento que pueda lubricar y disipar la energía térmica generada por sus partes, ya que el motor produce una gran cantidad de calor al momento de conducir y es allí donde entra en función el radiador de aceite. Dicho radiador se posiciona cómo el componente perfecto para disipar el calor, debido a que es una pieza pequeña qué funciona exclusivamente cuando el motor se pone en marcha, y cuyo propósito principal es el de enfriar el aceite conforme este se movilice cerca de él, y esto se debe a que la pieza cuenta con unas aletas de refrigeración las cuales son accionadas bajo el flujo de aire del exterior.
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¿Qué es el radiador de aceite del coche?
El radiador de aceite del coche es una pieza qué va ubicada en el motor, la cual tiene como funcionalidad disipar el calor generado por el mismo a través de sus aletas que son accionados al flujo del aire exterior. Es importante destacar que este tipo de piezas utilizan distintos sistemas de refrigeración como viene a ser el agua, con el objetivo de conseguir una temperatura equilibrada dentro del motor para así mantener la lubricación correcta en cada componente. Por otra parte, estos pueden ser clasificados en dos tipos, los cuales son de aceite/agua y aceite/aire, por lo que a continuación te daremos a conocer cómo funcionan cada uno de estos.
¿Cuál es su funcionamiento?
Cómo se mencionó con anterioridad existen dos tipos de radiadores de aceite cuya función principal consiste en mantener una temperatura adecuada al líquido que fluye dentro de los componentes del motor. Sabiendo esto, te daremos a conocer los tipos de radiadores de aceite:
- Radiador de aceite/agua: En este tipo de radiador, el fluido circula por un intercambiador de temperatura de varias piezas, mientras que este refrigera el exceso de calor para que así el aceite frío logré alcanzar la temperatura de trabajo que requiere su motor.
- Radiador de aceite/aire: Por otra parte, este radiador es de menor tamaño en comparación al anterior, el cual le permite refrigerar directamente el aceite del motor con el flujo de aire ambiental, los cuales provienen de los ventiladores de refrigeración. Esto incorpora un pequeño dispositivo de medición para la temperatura cómo también un termostato y una válvula de derivación, dónde está última se encarga de parar el flujo de aceite en el motor en caso de que este no se encuentre en la temperatura adecuada.
Por último, es importante destacar qué cada uno de estos utilizan diferentes mecanismos como lo son el enfriador de aceite de tubos aletados, el enfriador de aceite de la transmisión y el de la placa aplicada.
¿Para qué sirve?
El aceite de motor utiliza una temperatura determinada para esta poder funcionar en todas las capacidades que ofrece, ya que, si este supera el límite de temperatura establecido, puede ocasionar problemas en el rendimiento del vehículo como también en los componentes del motor. Debido a esto cada vehículo integra lo que se conoce como el radiador de aceite, este sirve para disipar el calor generado por el motor al andar en marcha, gracias a su sistema de tubos antioxidantes dónde se moviliza el líquido y se mantiene en una temperatura óptima, por lo que de esta manera será redirigido a través de sus aletas de refrigeración para que pueda llegar al motor y así asegurar el funcionamiento del mismo a largo plazo.
Diferencia con el radiador eléctrico
Cómo bien sabrás los radiadores de aceite funcionan a base del aire que pasa a través de sus tubos alterados, como también pueden funcionar a base de agua; sin embargo, existen los radiadores eléctricos, los cuales funcionan a base de una corriente fija. Por su parte, este tipo de radiador eléctrico tiene como finalidad proteger los diferentes dispositivos electrónicos incorporados en el vehículo, ya que gracias a su diseño y funcionalidad, se hará cargo de mantener una temperatura óptima en cada uno de dichos componentes, siendo su principal diferencia con respecto a que los radiadores de aceite, quienes se encargan de proteger y alargar la vida útil del motor.
¿Gasta mucha luz el calentador de aceite?
Deberás saber que dependiendo del tipo de radiador que incorpora cada vehículo variará el gasto de este con respecto a la energía. Por lo general, un calentador de aceite gasta un aproximado de 1.2 voltios, lo cual dependerá en primera instancia de cuántas veces puedas arrancar el motor. Es importante destacar que el radiador es un componente que no se encuentra exento de fallas, debido a que un mal funcionamiento de este puede ocasionar problemas mayores con respecto a las piezas del motor, lo que da como resultado daños graves en el vehículo.
¿Dónde comprarlo?
Si tu radiador dejó de funcionar correctamente y necesitas un reemplazo, no tienes de qué preocuparte. Podrás encontrar una gran variedad de locales con repuestos de primera calidad para tu vehículo, cómo también diversas páginas web qué en base a terceros podrás adquirir el radiador ideal para tu coche. Mantener tu motor con una temperatura adecuada para su funcionamiento es una tarea importante para el radiador, por lo que es necesario que este componente al ser adquirido no presente ningún tipo de fallas y le pueda ser de gran utilidad al vehículo al momento de conducir.
Precios
Cada radiador ofrece un precio completamente diferente entre sí, debido a una gran variedad de aspectos dentro del componente, como lo es el modelo del radiador, la desarrolladora, el tipo de radiador (aceite/aire o aceite/agua), como también cada una de sus variaciones en el mecanismo. Por otra parte, otro punto de gran importancia viene a ser el lugar o el método de adquisición del complemento, ya que si este no mantiene algún tipo de sello que demuestre una falla en cuanto a su autenticidad, su precio se verá reducido.
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