Los coches con motorización gasolina y diésel están en el punto de mira mediático desde hace cierto tiempo por la importancia cada vez más creciente por el cuidado del medio ambiente, la reducción de emisiones, la fabricación de coches eficientes, etc., pero lo cierto es que la gran mayoría de modelos que actualmente se encuentran a la venta son de tipo diésel o gasolina.
Es por lo anteriormente indicado, que en este artículo vamos a intentar resolver una duda bastante recurrente pues es bastante común que personas que han tenido un vehículo diésel pasado un tiempo su siguiente adquisición pueda llegar a ser de tipo gasolina. Cuando esto se da la pregunta es casi obligada ¿se conduce igual un coche gasolina que uno diésel? Y la respuesta es no. Por ello, en este artículo vamos a ver las principales diferencias en cuanto a conducción se refiere entre un coche con motorización gasolina o diésel. ¿Te interesaría saber como conducir de modo más óptimo tu flamante coche gasolina? ¡Pues vamos a descubrirlo!
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Cómo arrancar un coche de gasolina
Lo primero y por orden lógico, vamos a ver la diferencia principal en el primer acto de conducción, nos referimos al arranque del vehículo. Al margen de aspectos comunes en ambos casos como el tener punto muerto y no pisar el acelerador, los coches gasolinas en este sentido nos lo ponen más fácil pues no será necesario esperar esos segundos antes de arrancar que el motor diésel precisa para lubricarse correctamente.
¿Qué puede ocurrir a la larga si circulo con un gasolina como si fuera diésel?
Conducir un coche gasolina como uno diésel no es realmente algo que pueda llegar a dañar de forma muy significativa a nuestro vehículo, si bien es cierto que aspectos como el nivel de revoluciones al cual se cambia de marcha en uno y otro caso podría llegar a provocar ciertos problemas en componentes y el propio motor, si bien deberían ser casos muy extremos y añadido a otras circunstancias.
Cómo cambiar de marchas en un coche de gasolina
Referente a lo que indicábamos en el punto anterior, un coche gasolina tiene un rango de revoluciones distinto en los cuales es interesante cambiar de marcha, por tanto cuando hablamos de coches gasolina este rango se mueve entre las 2.000 y las 2.500 revoluciones mientras que en un motor diésel este abanico se rebaja de entre las 1.500 y 2.000 revoluciones por minuto o rpm. Por tanto, si venimos de un coche diésel es importante no cambiar de marcha demasiado temprano impidiendo al motor trabajar de una forma óptima.
Cómo conducir un coche de gasolina en cuestas
Los coches gasolina suelen ser menos deseados entre los conductores que acaban de obtener el carnet de conducir entre otras cuestiones justamente por esta, y es que un coche gasolina suele ponernos las cosas algo más complicadas en las cuentas al necesitar ser bastante ágil y firme con los pies. Es por ello que si deseamos evitar el tan molesto calado del motor, podemos ayudarnos del freno de mano e ir acelerando hasta que nos permita quitar el freno de mano y el vehículo directamente avance sin calarse al haber soltado prácticamente todo el embrague.
Otras diferencias entre conducir diesel y gasolina
Los coches con motorización gasolina suelen ser más confortables en la conducción al realizar cambios menos bruscos durante la marcha. Una motorización más silenciosa también afecta positivamente a este citado confort y es que los motores diésel suelen ser más ruidoso y los cambios de marcha pueden notarse de un modo ligeramente más significativo por ello algunos conductores prefieren los coches gasolina por una cuestión de comodidad al volante.
Conducción más suave
Como acabamos de comentar, los coches gasolina permiten una conducción más suave que en un vehículo diésel y parte de ello se debe también a ese abanico más amplio de revoluciones lo cual puede hacernos cambiar en un menor número de ocasiones de marcha. Si bien no ha de ser un motivo definitivo para decantarse por uno u otro, no deja de ser algo relevante para determinado tipo de conductores y conductoras sobretodo si estos se han acostumbrado.
Conducción de un coche de gasolina para la ciudad
Un coche gasolina está creado para utilizarse en cualquier contexto, si bien es cierto que para que a nivel económico resulte rentable vs la opción de un vehículo diésel nuestra conducción debería realizarse principalmente por ciudad y además no realizar más o mucho más de 10.000 kilómetros anuales, pues si hacemos más de esa cantidad, el coste extra que supone adquirir un mismo vehículo con motorización diésel empezaría a salir rentable, nuevamente, desde un punto de vista puramente económico.
Maneras de potenciar un motor atmosférico
Existen algunos tips o consejos con los cuales potenciar un motor atmosférico. Ejemplos de ello podrían ser refinar y pulir los colectores de admisión, una tarea reservada principalmente para profesionales del sector dada su relativa complejidad, también se puede optar por un aumento de la presión en la rampa así como sobredimensionar los inyectores del vehículo, entre otros.
Esperamos que este artículo os haya gustado y os permita conocer más y mejor los motores gasolina, unos motores amados por muchos y odiados por otros tantos a los cuales aún les quedan kilómetros por recorrer de manos de millones de conductores y decenas de marca distintas.
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