Como hemos dicho en más de una ocasión, a la hora de ponernos al volante estamos afrontando muchas posibles situaciones que de no ser prevenidas de un modo correcto pueden derivar en peligro de sufrir algún tipo de accidente o incidente. En este artículo vamos a centrarnos en uno originado por algo tan previsible y a su vez peligroso como es el sol y su luz.
Conducir con el sol en determinadas posiciones puede llegar a ser peligroso pues sus rayos pueden llegar a deslumbrarnos y por ende perder la visión sobre la carretera durante unos segundos, en ocasiones de forma parcial y en otras de forma total con los innumerables peligros que de ello puede derivarse. Si te interesa saber como evitar esta peligrosa situación y conocer los mejores tips para evitar deslumbramientos no te pierdas este artículo.
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¿Cómo podemos evitar los deslumbramientos?
A continuación, pues, vamos a ver algunos de los mejores métodos para evitar ser deslumbrados cuando nos encontramos al volante en un día soleado.
Usar gafas de sol polarizadas y con cristales de color azulado
En primer lugar y como primera barrera entre el sol y nuestra vista, será recomendable utilizar gafas de sol polarizadas que no es otra cosa que gafas de sol a las cuales se les aplica una lámina exterior extra capaz de filtrar los rayos del sol que provienen en una dirección determinada. Con el uso de este complemento estaremos consiguiendo evitar la pérdida de visión sobre la carretera y a su vez notaremos un menor cansancio vinculado a la recepción de rayos del sol.
Cuando nos deslumbre el sol, mantener la trayectoria del vehículo y disminuir la marcha
Si no llevamos gafas de sol o simplemente los rayos del sol nos alcanzan directamente a los ojos y no podemos ver momentáneamente la carretera, deberemos intentar mantener la trayectoria del vehículo y reducir la velocidad. Esta situación es altamente peligrosa y únicamente nos “asegura” no sufrir una salida de pista durante unos pocos segundos, pero no evitar la colisión con el coche delantero y si frenamos en exceso que no nos colisionen a nosotros el coche que nos sigue.
Si conducimos con el sol de frente y nos deslumbra, es recomendable parar y esperar cinco minutos a que el sol cambie de dirección
Para evitar situaciones como la anterior y si el lugar por el cual circulamos nos lo permite, deberemos parar y esperar a que el sol cambie de posición de modo que podamos proseguir nuestra marcha sin la molestia que los rayos de sol nos puedan generar. Esta acción es claramente preventiva y en la mayoría de los casos y cuando no disponemos de elementos que puedan disuadir esa molestia, será la mejor opción.
Reduce tu velocidad y realiza paradas regulares para descansar la vista
Si bien en los casos anteriores hablábamos de situaciones donde el sol nos impedía proseguir la marcha, también se puede dar la situación que el sol nos de indirectamente si bien sin afectar a la visión pero que pasado el tiempo de conducción notemos agotamiento. Por ello será recomendable realizar paradas periódicas para recuperar energía y descansar la vista.
Colabora encendiendo las luces cortas para que los que vengan de frente
En ocasiones el sol puede hacer que no veamos con claridad lo que tenemos acercándose por el carril contrario. Es por ello por lo que es recomendable llevar las luces cortas con el fin de facilitar al resto de conductores nuestra visibilidad.
El parasol, que debe ser siempre extensible y abatible, solo debe usarse en los momentos puntuales
El parasol es un elemento que puede ayudarnos e solventar una situación puntual pero no ha de ser un habitual en nuestra conducción. Su misión no es la de evitar los rayos del sol durante largos trayectos pues entre otros aspectos, nos está eliminando una parte de nuestro campo de visión.
Nunca conduzcas con gafas de sol durante las noches o en zonas oscuras
Las gafas de sol como hemos visto son aliados de gran importancia ante la fuerza de los rayos del sol, si bien cuando este no está presente su uso será claramente contraproductivo. Si utilizamos las gafas de sol de noche estaremos reduciendo aún más nuestra capacidad de visión.
Mantén limpios los cristales delanteros del coche
Unos cristales limpios nos van a permitir contrarrestar la pérdida de visibilidad que pueda ocasionarnos la luz solar y es que en ocasiones al tener los cristales en mal estado ello hace que se unan dos aspectos negativos para la visibilidad al volante. Por ello en nuestra mano está cuanto menos eliminar una de las dos de forma proactiva.
Cuida tus ojos en todo momento
Nuestros ojos son clave para circular y por ello hemos de tenerlos cuidados del modo que corresponde. Ojos hidratados, protegidos con gafas de sol, descansados, etc., serán imprescindibles para mejorar nuestra seguridad al volante y la de quienes con nosotros circulan.
¿Qué tipo de gafa de sol es más recomendable para conducir?
Existen diferentes tipologías de gafas de sol y por ello no cualquiera será apta o cuanto menos recomendable para la conducción de vehículos. En el caso de conducción de coche con luz solar es recomendable emplear gafas polarizadas con un filtro de color gris o azul. Si disponemos de opciones en cuanto a niveles se refiere optaremos por niveles 2 o 3.
El color de los cristales
Como decíamos los filtros que deberán llevar nuestras gafas serán de color gris o azul, en ocasiones ello no implicará que el color del cristal sea del mismo color, por tanto nosotros hemos de centrarnos en el color del filtro por encima de colores externos.