La industria automovilística es una de las más grandes e innovadoras de todos los tiempos, siempre con mentalidad de progreso y calidad. En este sentido, la Comisión Europea a mediados del 2021 realizó una cumbre donde se estableció que para el 2035 los coches de combustión deberán dejar de ser fabricados, esto como una moción aprobada en favor del medioambiente, ya que este tipo de coches son los que producen gases contaminantes que son emitidos al ambiente y que están dañando la atmósfera, etc. Esto mismo ha puesto a la industria en una situación complicada donde muchos están de acuerdo, pero muchos otros son los que están en desacuerdo debido a que esto cambiaría por completo la dinámica que se había venido llevando hasta ahora y muchas marcas tendrían que hacer grandes modificaciones en sus instalaciones para poder mudarse a un futuro completamente eléctrico. A partir del 2023 las restricciones para coches de diésel y gasolina van a empezar a ser implementadas en varios aspectos y aunque ya todos los fabricantes se están preparando para la electrificación total, hay otras que están luchando en contra de la corriente y que han conseguido hacerlo, por lo que para el 2023 continuarán fabricando coches diésel.

Algunas marcas han logrado quedar fuera de la norma y sí podrán seguir fabricando y vendiendo sus coches diésel

Como se mencionó, la Comisión Europea hace unos meses acordó que lo mejor sería dejar de fabricar coches de combustión, en el futuro cercano, en 2035 para ser más exactos; por lo que los años que restan de aquí allá es para que las marcas reorden sus operaciones e instalaciones y se condicionen a ese futuro. Esta estipulación incluye coches con motores de gasolina, diésel e híbridos, tanto enchufables como no enchufables. Pero como es de esperarse muchos no están de acuerdo y debido a esto un grupo de marcas han logrado crear una medida o una condición que los deja fuera de esta prohibición por al menos dos años más. Esto es llamado y conocido como “La Enmienda Ferrari”, la cual explicaremos a continuación.

¿De qué se trata la Enmienda Ferrari?

La medida establecida por la Comisión Europea abarca que se dejarán de vender los coches de combustión y se fabricarán solo coches eléctricos, 100% eléctricos. En tal sentido, no todos los países están de acuerdo con esta aprobación, como por ejemplo Alemania, el cual es pionero en la industria automotriz con un peso considerablemente importante, siendo así que se mostró a favor de por lo menos retrasar la fecha hasta el año 2040. Pero, Italia es realmente el país que más se ha mostrado en resistencia hacia el tema. Esto mismo ha ocasionado que se habrán excepciones por lo menos en Europa, pues hay marcas que han conseguido librarse de la prohibición por lo que podrán seguir vendiendo y fabricando sus coches de combustión.

El motivo que ha sustentado la excepción se conoce como “Enmienda Ferrari”, aunque la marca misma marca italiana Ferrari queda fuera. Es el representante legal de dicha marca italiana quien contribuyó a las excepciones de las limitaciones de Diesel y gasolina, logrando que marcas y modelos de alta exclusividad o alta potencia queden fuera de la norma, es decir coches de lujo y grandes deportivos.

¿Qué marcas seguirán fabricando coches diésel en 2023?

¿Qué marcas están incluidas en la enmienda? Figuran marcas como Aston Martin, Lamborghini y McLaren

Específicamente la Enmienda Ferrari se muestra a favor de marcas que produzcan menos de 10.000 unidades anualmente (quedando fuera Ferrari), pues esta cifra realmente no se considera determinante en las emisiones contaminantes y su impacto global. La enmienda mencionada no exime por completo a las marcas favorecidas de las limitaciones, pero extiende su plazo al menos dos años más, es decir, hasta el 2036, tiempo en el cual pueden surgir alegaciones a las autoridades correspondientes para anular o cancelar el cupo de CO2 de los autos. Es aquí donde aparecen las grandes beneficiadas de la enmienda: Bugatti, Koenigsegg, Lamborghini, McLaren, Aston Martin y Rolls-Royce.

El papel de la ESCA

La excepción a la medida también se logra gracias a la ESCA, la Alianza Europea de Fabricantes de Vehículos de Bajo Volumen de Ventas, quien figura como representa de marcas como Bugatti, McLaren, Aston Martin, Pagani, Iones Automotive, Koenigsegg o Rímac, quien antes se había pronunciado en muchas ocasiones solicitando medidas especiales para los fabricantes mencionados, manifestando que el ciclo de vida de sus modelos es considerablemente más largo y que el impacto de los mismos con respecto a sus emisiones es muy bajo, casi insignificante.

Estas son las marcas que seguirán fabricando en el 2023 coche diésel

Todo lo previamente dicho es un sustento de un futuro que está considerablemente cercano, pero aun así y con las restricciones se empezarán a imponer desde el año próximo, aún hay marcas que siguen apostando a los modelos de Diesel y mayormente a los híbridos. No solo las mencionadas Aston Martin, Lamborghini, Bugatti, McLaren, entre otras, sino también marcas como Mercedes-Benz con varios modelos como el Mercedes-Benz C 300 e híbrido enchufable, Toyota con el Yaris Hybrid o el Corolla híbrido, Renault con el Renault Captur E-TECH híbrido enchufable, Skoda con el Skoda Octavia iV híbrido enchufable, entre otras marcas como Kia, Hyundai, Lexus, BMW, entre otras.

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Apostar a los coches de diésel y asimilar el cambio progresivamente

El sector de los coches diésel es uno en el que las marcas han depositado no sólo esperanza sino ingresos y esfuerzos, pues es considerado como un potencial entre los de combustión. De hecho, estos son utilizados como caminos o vías a lo que es la transformación eléctrica por completo. La transición abrupta no es aceptada más sin embargo la progresividad de los coches de combustible Diesel, a híbridos y luego a eléctricos permite un espacio de asimilación y evolución sin tantas presiones, o al menos sin presiones fuera de lo común. Los Diesel son ideales pues representan entre los de combustión opciones más amigables con el ambiente, es por ello que cada día este sector crece y crece, y aunque se espera la aplicación de una limitante para el 2035, en todo el tiempo transcurrido seguramente se impondrán nuevos alegatos para que al fin de cuentas no se aplique (al menos en su totalidad).


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