Garantía en coches nuevos: lo que debes saber
Cuando compras un coche nuevo en España, la garantía es uno de los aspectos más importantes que asegura tu tranquilidad. Se trata de un compromiso legal de la marca para reparar sin coste los fallos de fabricación o problemas derivados de defectos de origen.
Esta protección cubre tanto piezas como mano de obra durante un tiempo establecido, lo que evita sorpresas económicas. Sin embargo, no todo está incluido: el mantenimiento habitual, las piezas de desgaste y los daños por mal uso suelen quedar fuera. Por eso, es esencial leer bien las condiciones de cada fabricante.
¿Qué garantía ofrecen las marcas de coches de España?
- Averías mecánicas: fallos en motor, caja de cambios, transmisión, dirección o suspensión.
- Problemas eléctricos y electrónicos: centralitas, cableado, sensores y sistemas de control.
- Sistema de frenos, dirección, combustible e inyección.
- Sistema de refrigeración: radiador, bomba de agua, termostato.
- Sistema de escape (no incluye piezas de desgaste como catalizador tras largos kilómetros).
- Airbags y cinturones de seguridad.
- Sistema eléctrico general: alternador, motor de arranque, batería de 12V en algunos casos (no siempre).
- Sistema multimedia y de infoentretenimiento: pantalla, radio, GPS, conexiones.
- Carrocería: defectos de pintura y oxidación (normalmente de 5 a 12 años en garantía anticorrosión).
- Cristales, lunas, iluminación y neumáticos (si es desgaste no).
- Batería de coches eléctricos e híbridos: habitualmente entre 5 y 8 años o un kilometraje determinado (ejemplo: 160.000 km).

En España, la mayoría de fabricantes ofrecen un mínimo de tres años de garantía o 100.000 kilómetros, lo que ocurra primero. Algunas marcas, para diferenciarse, amplían la cobertura hasta siete años, lo que proporciona al comprador mayor seguridad y confianza. Este tipo de garantías cubren los fallos de origen y garantizan la reparación sin coste adicional, siempre que se respeten los mantenimientos oficiales.


¿Cómo funciona la garantía de un coche?
Cuando detectas un fallo en el vehículo, el proceso es sencillo: debes acudir a un servicio técnico autorizado de la marca. Allí verificarán el problema y, si está dentro de los términos de la garantía, se reparará sin coste alguno.
Es importante no realizar reparaciones por cuenta propia ni acudir a talleres no oficiales, ya que esto podría invalidar la garantía. Además, mantener el plan de revisiones recomendado por el fabricante es clave para conservar este derecho durante todo el tiempo de vigencia.
Duración estándar y ampliaciones
En Europa, la normativa obliga a que todo coche nuevo tenga al menos dos años de garantía. Sin embargo, en España la mayoría de marcas ofrecen tres años como estándar, lo que da un margen adicional al comprador.
Algunas compañías añaden programas de ampliación de garantía que se pueden contratar de forma opcional. Estos planes prolongan la cobertura hasta cinco, siete o incluso diez años, dependiendo del fabricante y del tipo de vehículo adquirido.
Y… ¿La de los vehículos comerciales?
Las garantías para furgonetas y vehículos comerciales suelen ser similares a las de los turismos, aunque en muchos casos la duración es más limitada por el uso intensivo al que están sometidos. Lo más común es que sean de dos años o un número concreto de kilómetros, lo que ocurra primero.
Algunas marcas ofrecen ampliaciones específicas adaptadas a empresas, lo que permite mantener la flota con cobertura frente a averías durante más tiempo. Esta opción resulta muy atractiva para autónomos y compañías que dependen de su movilidad diaria.