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El Volvo 850 se lanzó como un hito en innovación y seguridad para la marca sueca. Con su tracción delantera, chasis robusto y suspensión independiente multibrazo, el 850 se destacó por su excelente manejo y confort de marcha. Las motorizaciones ofrecían desde un eficiente 2.0 hasta un potente 2.5 litros, con variantes turbo para mayor rendimiento. La seguridad era pionera con bolsas de aire y estructura reforzada.
El Volvo 850 estaba disponible en dos variantes principales de carrocería: sedán y station wagon. El sedán ofrecía una línea elegante y tradicional, mientras que el station wagon sumaba practicidad con un generoso espacio de carga. Ambas variantes mantenían la identidad de Volvo en términos de seguridad y calidad. En el mercado aparecieron también versiones deportivas, como el 850 T-5 y T-5R, que añadían un toque de deportividad al modelo con mejoras en motorización y suspensión.
El año 1992 marcó el debut del Volvo 850. A lo largo de su producción, se incorporaron actualizaciones y mejoras. En 1993, se lanzó la versión wagon, conocida por su capacidad y versatilidad. En 1994, el 850 recibió una versión turbo, y en 1995, la edición limitada T-5R catapultó la marca al estatus de culto entre entusiastas. Finalmente, en 1996 el 850 se actualizó con una nueva gama de motores y en 1997, fue reemplazado por la serie S70/V70.
El Volvo 850 se ofreció en múltiples versiones, destacando el nivel de entrada GLT, el lujoso GLE y el dinámico T-5. Cada versión se adaptaba a distintas necesidades y presupuestos. El T-5R, una edición especial con altas prestaciones, se convirtió en un modelo icónico. También existieron versiones más enfocadas en la eficiencia, como el 2.0L, que ofrecían un equilibrio entre rendimiento y economía.
En términos generales, el Volvo 850 destacaba por su seguridad avanzada, confort y calidad de materiales. Incorporaba características como ABS, control de tracción y un completo sistema de airbags. Su interior espacioso y refinado brindaba una experiencia de conducción premium.
Comodidad8,9
Seguridad9,2
Calidad/Precio9,1
Diseño9,0
El precio del Volvo 850 en su lanzamiento reflejaba su posicionamiento como una berlina de gama media-alta. Dependiendo del mercado y la versión, el 850 tenía un rango de precios que iba desde los más accesibles en modelos base hasta los significativamente más altos en las versiones deportivas T-5 y T-5R, que incluían mejoras en rendimiento y acabados de lujo. Con el paso del tiempo, el 850 se ha convertido en un vehículo de interés para coleccionistas y entusiastas, lo que puede influir en su valor actual en el mercado de segunda mano. Su durabilidad y el estatus de clásico moderno mantienen los precios en un rango atractivo para vehículos de su edad y características.
Las fichas técnicas del Volvo 850 detallan motorizaciones que varían desde los 126 CV en los modelos básicos hasta los 250 CV en las versiones T-5R. Las medidas del vehículo ofrecían un habitáculo espacioso y un maletero de gran capacidad, especialmente en el modelo wagon. Los acabados interiores variaban, con opciones que incluían tapicería de cuero, paneles de madera y sistemas de audio de alta calidad.
La gama del Volvo 850 ofrecía una variedad de colores que iban desde los tonos conservadores hasta los más llamativos. Colores como el rojo coral o el verde turquesa se unían a los clásicos plateado, negro y blanco. Las pinturas de Volvo eran reconocidas por su durabilidad y capacidad para resistir las inclemencias del tiempo, manteniendo el brillo y protegiendo la carrocería.
Las llantas del Volvo 850 eran un elemento distintivo que contribuía a su estética robusta y elegante. Dependiendo de la versión, se podían encontrar llantas de aleación de 15 o 16 pulgadas, con diseños que iban desde los clásicos hasta los más deportivos en las versiones T-5 y T-5R.
El Volvo 850 (1992) ofrecía un interior que destacaba por su confort y funcionalidad. Dentro de sus características principales, se encontraban:
El Volvo 850 fue pionero en incorporar medidas de seguridad avanzadas para la época. Incluía airbags frontales, cinturones de seguridad con pretensores y un sistema de protección contra impactos laterales (SIPS). El chasis estaba diseñado para absorber energía en caso de colisión, protegiendo a los ocupantes.
A pesar de ser un vehículo de principios de los 90, el Volvo 850 (1992) no escatimaba en ofrecer un sistema de audio de calidad. Contaba con:
Los opcionales exteriores en el Volvo 850 incluían mejoras estéticas y prácticas como llantas de aleación de distintos diseños, faros antiniebla y techo solar eléctrico, que no solo aportaban estilo sino también funcionalidad al vehículo.
En el habitáculo, los opcionales interiores se centraban en elevar la experiencia de lujo y confort, con elementos como asientos con ajuste eléctrico, climatizador automático y detalles en madera para el tablero y paneles de puerta.
Existían distintos paquetes opcionales que agrupaban funcionalidades y mejoras, como el paquete de invierno, que incluía asientos calefactables y protección adicional contra el frío.
Entre los opcionales para el Volvo 850, se encontraban también el control de tracción para mejorar la estabilidad, junto con sistemas de sonido premium y alarma con control remoto para aumentar la seguridad y la experiencia auditiva dentro del coche.
Para calcular el seguro del Volvo 850 (1992), es importante considerar factores como:
La potencia del Volvo 850 de 1992 varía entre aproximadamente 126 CV en sus versiones básicas y puede llegar hasta los 250 CV en las variantes más deportivas como el 850 T5-R.
El Volvo 850 se ofrece en dos tipos de carrocería: sedán de cuatro puertas y familiar de cinco puertas.
El Volvo 850 dispone de motorizaciones que van desde los 2.0 litros hasta los 2.5 litros en gasolina, y también incluye una versión turbodiésel de 2.5 litros.
Dependiendo de la versión y motorización, la velocidad máxima del Volvo 850 puede variar desde unos 190 km/h hasta alcanzar los 240 km/h en las variantes más potentes.
El Volvo 850 fue uno de los primeros vehículos en incorporar airbag lateral y cinturones de seguridad con pretensores, consolidando la reputación de Volvo en cuanto a seguridad vehicular.
El Volvo 850 cuenta con cinco asientos. Ofrece un habitáculo espacioso y un maletero con buena capacidad, especialmente en la versión familiar.
El consumo de combustible del Volvo 850 varía según la motorización y el tipo de conducción, pero en general, se sitúa en un rango de 8 a 11 litros cada 100 km en ciclo mixto, siendo ligeramente más económico en versiones diésel.