El Toyota Tercel se lanzó en 1978 como un vehículo compacto y económico, llegando al mercado internacional en 1979. Destacaba por su eficiencia en consumo de combustible y su fiabilidad mecánica, dos aspectos muy valorados por los consumidores de la época. Con opciones de tracción delantera o tracción en las cuatro ruedas, el Tercel ofrecía una conducción versátil. A ello se sumaban su diseño funcional y su equipamiento acorde con los estándares de la época, que incluía características de seguridad y confort adecuadas para un coche de su segmento.
El Toyota Tercel de 1979 estaba disponible en diversas variantes de carrocería, adaptándose a las distintas necesidades de los conductores. La gama incluía una versión de dos puertas, una más práctica de cuatro puertas, y una funcional variante hatchback de tres puertas. Más tarde, se introdujo también una versión de cinco puertas, ampliando así su versatilidad. Cada una de estas opciones mantenía la esencia del Tercel, aunque con diferenciaciones en espacio y estilo.
La primera generación del Toyota Tercel se comercializó desde 1978 hasta 1982, aunque no llegó a algunos mercados internacionales, como el español, hasta el año siguiente, 1979. Supuso un antes y un después en cuanto a coches compactos, estableciendo un equilibrio entre eficiencia y funcionalidad. A lo largo de su historia, el Tercel evolucionó a través de varias generaciones, cada una con mejoras en diseño, tecnología y rendimiento. Pese a su discontinuación en el año 2000, el Toyota Tercel dejó un legado de calidad y eficiencia en la marca japonesa.
El Toyota Tercel inicialmente se ofrecía en modelos básicos que enfatizaban su accesibilidad y economía. Conforme avanzó su producción, se añadieron versiones con mayores prestaciones y acabados más lujosos. La gama se diversificó incluyendo versiones con mayor equipamiento y comodidades, como aire acondicionado y sistemas de sonido mejorados.
El Tercel destacaba por su rendimiento en consumo de combustible, una característica esencial en la era del ahorro energético. Su diseño compacto ofrecía una manejabilidad excepcional en entornos urbanos, mientras que su interior era sorprendentemente espacioso para su tamaño. La gama de motores disponibles proporcionaba un equilibrio óptimo entre potencia y economía, y su construcción robusta lo convertía en un vehículo duradero y confiable.
Comodidad9,0
Seguridad9,4
Calidad/Precio9,5
Diseño9,5
El Toyota Tercel de 1979 se posicionó como una opción asequible en el mercado de coches compactos. Su precio competitivo lo hacía accesible para una amplia gama de consumidores, buscando un vehículo fiable y económico sin renunciar a las comodidades básicas. Los precios variaban según la versión y los equipamientos seleccionados.
Las fichas técnicas del Toyota Tercel detallaban sus especificaciones mecánicas y dimensiones, ofreciendo a los clientes información clave para su decisión de compra. Los acabados disponibles permitían cierta personalización del vehículo.
El Toyota Tercel de 1979 se ofrecía en una gama de colores que iba desde los tonos sobrios hasta opciones más vivas, permitiendo a los compradores elegir según sus preferencias personales. Cada color había sido seleccionado para realzar las líneas del Tercel y ofrecer un aspecto atractivo y duradero.
Las llantas del Toyota Tercel se diseñaron para complementar su estética funcional y proporcionar una conducción estable. Disponibles en diferentes estilos y tamaños, las llantas no solo influían en la apariencia del vehículo, sino también en su comportamiento en carretera. Las opciones de llantas reforzaban la impresión de calidad y atención al detalle que Toyota quería transmitir con este modelo.
El Toyota Tercel de 1979 vino con un interior que buscaba la funcionalidad y la comodidad sin grandes lujos. Con un diseño sencillo pero efectivo, ofrecía:
En términos de seguridad, el Toyota Tercel de aquellos años venía con lo básico. Cinturones de seguridad y un diseño estructural pensado para absorber impactos, sin las sofisticaciones de la tecnología moderna.
Para la época, el sistema de audio del Tercel era bastante básico, incluyendo una radio AM/FM y, en algunos modelos, un reproductor de cintas.
En cuanto a opcionales exteriores, había ciertas mejoras disponibles que incluían llantas de aleación, vinilos decorativos y diferentes opciones de pintura.
Internamente, se podían solicitar detalles como fundas para los asientos, alfombrillas personalizadas y volante de mejor agarre.
Los paquetes opcionales se limitaban a combinaciones de confort y estilo, enfocándose en mejorar la experiencia de conducción.
Con el Toyota Tercel podías optar a extras como aire acondicionado, un lujo para aquellos años, y sistemas de sonido de mayor calidad.
Para calcular el seguro del Toyota Tercel de 1979, considera lo siguiente:
El Toyota Tercel 1979 ofrecía motores con un rango de potencias que podían variar aproximadamente entre 60 y 80 caballos de vapor (CV), dependiendo de la variante y la configuración específica del motor.
El Toyota Tercel de 1979 venía equipado con motores de gasolina de 4 cilindros en línea, con cilindradas que oscilaban comúnmente entre 1.3 y 1.5 litros.
La velocidad máxima del Toyota Tercel 1979 podía variar, pero típicamente se situaba en un rango de 140 a 160 km/h, dependiendo de la versión y el equipamiento del motor.
El Toyota Tercel 1979 estaba diseñado para acomodar a un máximo de 4 o 5 ocupantes, dependiendo de la configuración interna y el modelo específico.
El Toyota Tercel de 1979 estaba disponible con opciones de transmisión manual de 4 o 5 velocidades y, en algunos mercados, con una transmisión automática de 3 velocidades.
El modelo Toyota Tercel de 1979 se ofrecía en distintas carrocerías, incluyendo versión de 3 y 5 puertas hatchback, así como una variante sedán de 2 o 4 puertas.
Sí, el Toyota Tercel 1979 introdujo versiones con tracción integral (4WD), aunque esta característica no estaba disponible en todos los mercados ni en todas las variantes del modelo.