El Toyota Carina de 1996 se presentó como un sedán robusto y fiable, enmarcado dentro de la tradición de calidad y durabilidad de la marca japonesa. Con una estética que equilibra clasicismo y funcionalidad, este modelo fue diseñado para ofrecer una experiencia de conducción confortable y segura, apuntando a un público que valora la practicidad y eficiencia. Su motorización y sistemas de seguridad estaban alineados con las expectativas de la época, consolidando al Carina como una opción sólida dentro de su segmento.
En 1996, el Toyota Carina se ofrecía en distintas variantes de carrocería, adaptándose a las necesidades de cada conductor. Entre ellas, destacaban las opciones de sedán y liftback, proporcionando una selección entre un perfil más tradicional y uno con un aire deportivo y versátil.
El año 1996 fue significativo para el Toyota Carina, marcando una etapa en la que el modelo consolidaba su presencia en el mercado con actualizaciones y mejoras notables.
El Toyota Carina de 1996 se presentaba en varias versiones, cada una con sus particularidades:
– Carina E: Conocida por su fiabilidad y durabilidad.
– Carina ED: Una versión más deportiva y elegante.
– Carina T190: Un modelo que ofrecía mejoras en rendimiento y comodidad.
Estas variaciones aseguraban una adaptabilidad a los gustos y necesidades de distintos conductores.
El Toyota Carina de 1996 destacaba por su confort en la conducción, su confiable rendimiento y la calidad de sus acabados. Era un vehículo pensado para durar y mantener su valor a lo largo del tiempo.
Comodidad9,1
Seguridad9,0
Calidad/Precio9,4
Diseño9,1
El Toyota Carina de 1996 se posicionaba con una excelente relación calidad-precio, siendo accesible para una amplia gama de consumidores.
Las fichas técnicas del Toyota Carina de 1996 reflejaban una gama de motores con diferentes configuraciones y potencias, desde económicos propulsores de gasolina hasta eficientes diésel. Los acabados y medidas del vehículo se diseñaron para maximizar el espacio y confort, ofreciendo una habitabilidad superior con materiales resistentes y de buena calidad.
El Toyota Carina de 1996 estaba disponible en una variedad de pinturas y colores que realzaban su diseño. Estas opciones permitían personalizar el vehículo según el gusto del cliente, desde tonos sobrios hasta más llamativos, siempre manteniendo un acabado de calidad que resistía bien el paso del tiempo.
Las llantas del Toyota Carina de 1996 se caracterizaban por su diseño funcional y resistente. Disponibles en diferentes estilos y tamaños, estas llantas no solo complementaban la estética del vehículo, sino que también contribuían a su estabilidad y rendimiento en carretera.
El Toyota Carina (1996) ofrece un interior diseñado para el confort y la durabilidad. Los asientos ergonómicos brindan soporte y comodidad incluso en los viajes más largos, mientras que la tapicería de calidad está pensada para resistir el paso del tiempo. En su gama, el Carina presentaba:
La seguridad es una prioridad en el Toyota Carina (1996), ofreciendo características como airbags frontales, frenos ABS y estructura reforzada para protección en impactos.
A pesar de ser un modelo de mediados de los 90, el Toyota Carina (1996) se esforzaba por ofrecer un sistema de entretenimiento adecuado. Contaba con una radio AM/FM, reproductor de cassettes y, en algunos modelos, un reproductor de CD. Los altavoces estaban estratégicamente ubicados para una experiencia de audio envolvente. Los controles de audio en el volante y la antena eléctrica eran algunos de los extras disponibles para maximizar la experiencia auditiva y la comodidad del conductor.
El Toyota Carina (1996) ofrecía una variedad de opcionales exteriores para personalizar su apariencia:
En el interior, el cliente podía optar por:
Para aquellos que buscaban aún más, el Toyota Carina (1996) ofrecía paquetes de equipamiento que incluían combinaciones de opcionales interiores y exteriores, a menudo a un precio más ventajoso que adquiriéndolos por separado.
Los opcionales generales disponibles para el Toyota Carina (1996) permitían a los compradores personalizar su vehículo con:
Calcular el seguro del Toyota Carina (1996) es sencillo a través de comparadores online. Es posible obtener cotizaciones personalizadas teniendo en cuenta factores como la ubicación, la edad del conductor, el historial de conducción y el nivel de cobertura deseado. Comparar diferentes ofertas puede garantizar encontrar un seguro a medida y al mejor precio.
El Toyota Carina de 1996 está disponible en varias motorizaciones que varían desde un 1.6 litros hasta un 2.0 litros, ofreciendo un rango de potencia que puede ir desde los 100 CV hasta aproximadamente los 175 CV, dependiendo de la variante específica.
La velocidad máxima del Toyota Carina de 1996 puede variar dependiendo de la motorización y el tipo de transmisión, pero en general se sitúa en un rango que puede ir desde los 180 km/h hasta los 220 km/h aproximadamente.
El Toyota Carina de 1996 es un vehículo con cinco asientos, diseñado para proporcionar un espacio cómodo tanto para el conductor como para los pasajeros.
El Toyota Carina de 1996 se ofrece con transmisiones manuales de cinco velocidades y automáticas, donde la disponibilidad puede variar según la motorización y el mercado.
El consumo de combustible del Toyota Carina de 1996 varía en función del tipo de motor y de las condiciones de conducción, con un promedio que puede oscilar entre los 7 y los 10 litros por cada 100 km recorridos.
El Toyota Carina de 1996 puede incluir características de seguridad como airbags frontales, cinturones de seguridad con pretensores y sistema de frenos antibloqueo (ABS), aunque la disponibilidad de estas opciones puede variar según el modelo y el mercado.
Sí, el Toyota Carina de 1996 es adecuado para el uso familiar gracias a su espacioso interior, su fiabilidad y su comportamiento práctico y seguro en carretera.