El Toyota Caldina, lanzado en 1997, se presenta como una opción robusta y confiable para aquellos que buscan un vehículo familiar con el respaldo de una marca de renombre. Con un diseño práctico y una carrocería que evoca la solidez, este modelo es ideal para el día a día. Su interior espacioso garantiza comodidad para todos los pasajeros, mientras que el motor ofrece un rendimiento eficiente y fiable. El Caldina es el compañero perfecto para viajes largos o para la rutina urbana, combinando funcionalidad con el placer de conducir.
Vamos a hablar de los colegas de la familia Caldina. Tienes desde el típico compi de aventuras, el modelo familiar, hasta el deportivo GT-T, que parece que siempre está listo para una escapadita de fin de semana. Cada trae su propia onda, pero todos comparten esa vibra de carro resistente y compañero de fatigas. ¡Y no olvides que hay versiones con tracción total para los que les gusta ir más allá del asfalto!
La Caldina del es un clásico moderno. Llegó en un momento en que Toyota quería ofrecer algo más que un simple coche familiar. Se buscaba mezclar utilidad con un toque de diversión y aventura.
Si estás buscando variedad, el Caldina del ’97 te la brinda. Desde la versión básica, perfecta para el día a día, hasta el potente GT-T, pensado para los más entusiastas. Cada está diseñada para satisfacer diferentes necesidades y estilos de vida.
Motorización | Variada, incluyendo opciones turbo |
Interior | Espacioso y confortable |
Seguridad | Sistemas avanzados para la época |
Carrocería | Diseño funcional y atractivo |
Extras | |
Equipamiento de serie |
Comodidad9,2
Seguridad9,1
Calidad/Precio9,3
Diseño8,8
El Caldina ofrecía una excelente relación calidad-precio. Su gama de precios permitía a una amplia gama de compradores acceder a un vehículo Toyota de gran calidad.
Cada ficha técnica del Caldina revela la atención al detalle de Toyota. Los acabados y medidas reflejan el compromiso de la marca con la calidad y la funcionalidad.
La paleta de colores en la que se ofrecía el Caldina era variada, permitiendo personalizar su aspecto para reflejar el estilo de su dueño.
Las llantas no son solo un accesorio, son parte del alma del coche. En el Caldina del ’97, encuentras opciones que van desde lo práctico hasta lo deportivo. Elige entre distintos tamaños y diseños, todos pensados para mejorar la estética y el rendimiento del vehículo. Ya sea que prefieras una conducción más confortable o una más firme y deportiva, las llantas del Caldina están diseñadas para complementar a la perfección el estilo y la funcionalidad del coche.
Siéntate y relájate, que te cuento cómo va el rollo por dentro de un Toyota Caldina de ’97. Primero, los asientos, que son la mar de cómodos y te recogen que da gusto en los viajes largos. La tapicería, que podía ser de tela o de cuero, dependiendo de cómo te rascases el bolsillo, era bastante resistente y le daba un toque elegante al coche. Además, tenías:
En seguridad, el Caldina se defendía bastante bien para su época. Venía con airbags frontales para el conductor y el copiloto, y tenía frenos ABS para que no te llevaras sustos en la carretera. Además, su estructura estaba diseñada para absorber los impactos y proteger a los ocupantes.
A ver, que estamos hablando del ’97, así que no esperes milagros en conectividad. Pero oye, tenía su radio con cassette (sí, cassette) y algunos venían con un CD player para los más modernos. Y sí, cuatro altavoces para que la música no sonara enlatada.
En el apartado técnico, el Caldina ofrecía algunos opcionales como:
Para el interior, podías encontrar:
Había paquetes de mejoras para quien buscaba algo más que lo básico, combinando opcionales de confort y rendimiento.
Los opcionales incluían desde mejoras en el sistema de audio hasta elementos de seguridad, pasando por detalles estéticos para personalizar tu Caldina.
Pues mira, calcular el seguro para un Caldina de esos años es un paseo. Solo necesitas saber los detalles técnicos del coche y tus datos de conductor. Dependiendo de si es el GT-T turbo o una versión más tranquila, el precio variará, ¡pero seguro que encuentras algo a tu medida!
Las variantes del Toyota Caldina 1997 ofrecen un rango de caballos de potencia que va aproximadamente desde los 100 CV hasta los 260 CV, dependiendo del modelo específico y la configuración del motor.
Los motores del Toyota Caldina 1997 tienen una cilindrada que varía entre 1.8 y 2.0 litros, y en algunas versiones de alto rendimiento puede llegar hasta 2.2 litros.
El Toyota Caldina 1997 generalmente tiene capacidad para 5 pasajeros, ofreciendo comodidad y espacio adecuado tanto en los asientos delanteros como traseros.
La velocidad máxima del Toyota Caldina 1997 puede variar según la versión y el motor, pero generalmente se sitúa en un rango entre 180 km/h y 240 km/h.
Sí, los modelos de Toyota Caldina 1997 están disponibles tanto con tracción delantera (FWD) como con tracción total (AWD), dependiendo de la versión específica del vehículo.
Sí, el Toyota Caldina 1997 incluye variantes deportivas como la GT-T, que ofrece un motor turbo más potente y una suspensión mejorada para una experiencia de conducción más deportiva.
El Toyota Caldina de 1997 incluye características de seguridad como frenos ABS, airbags frontales y cinturones de seguridad con pretensores, aunque las especificaciones pueden variar según el modelo y la región.