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El Seat Cordoba del año 1996 marcó una pauta en la gama de sedanes de tamaño medio gracias a su equilibrio entre funcionalidad y diseño. Ofrecía:
Con su llegada, la marca española confirmaba su compromiso con la calidad y la innovación, buscando posicionarse en un segmento altamente competitivo.
En 1996, el Seat Cordoba se presentaba diverso y versátil. Podías encontrarlo en varias versiones de carrocería, incluyendo el práctico sedán, el dinámico coupé y, para quienes necesitaban más espacio, el funcional Vario familiar. ¿A que mola tener donde elegir?
El año 1996 fue crucial para el Seat Cordoba, ya que significó la consolidación del modelo en el mercado de coches compactos, ofreciendo una alternativa sólida a lo convencional.
El Seat Cordoba de 1996 ofrecía una gama de versiones que se adaptaban a diferentes perfiles de conductores:
Cada versión tenía su esencia, destacando por detalles técnicos que marcaban la diferencia.
Las características generales del Seat Cordoba (1996) resaltaban por:
Estos aspectos, junto con el equipamiento de serie, hacían de este modelo una opción competitiva en su segmento.
Comodidad9,1
Seguridad9,2
Calidad/Precio9,2
Diseño9,0
El precio del Seat Cordoba de 1996 era uno de sus grandes atractivos, ofreciendo una excelente relación calidad-precio en todas sus versiones, haciéndolo accesible para una amplia gama de compradores.
La ficha técnica del Seat Cordoba 1996 detallaba con precisión sus acabados y medidas:
Cada detalle estaba pensado para ofrecer un alto nivel de confort y funcionalidad.
La gama de pinturas y colores del Seat Cordoba de 1996 realzaba su atractivo con opciones variadas que iban desde el clásico Blanco al elegante Negro Mágico.
Las llantas del Seat Cordoba de 1996 estaban cuidadosamente seleccionadas para complementar su estética dinámica y mejorar la experiencia de conducción, con diseños que variaban según la versión del modelo.
Siéntate, arranca y ¡vuela! Así podrías sentirte al acomodarte en los asientos del Seat Córdoba de ’96. Imagina tapicerías que, aunque no gritan lujo, sí susurran confort. Con ajustes básicos, pero suficientes para encontrar tu posición ideal. Eso sí, no esperes milagros, estamos hablando de un coche de los 90, ¿vale? Pero oye, que para el día a día, ¿qué más quieres?
Para su época, apuesta por lo esencial: airbags frontales, ABS y cinturones de seguridad para todos.
¿En busca de ritmos mientras conduces? Disfruta de la radio-cassette, que en aquellos días era el último grito. Aunque, venga, que el CD ya asomaba.
Al configurar tu Seat Córdoba, podías aderezarlo con paquetes que le dieran ese toque especial. Desde el acabado básico hasta el GTI, cada paquete traía sus propios juguetes. Unos añadían alerones para ese look deportivo, otros climatizador para esos días que ni el sol sabe qué hacer. Y luego estaba el paquete eléctrico, para quienes no querían darle ni al cristal.
Diversifica tu experiencia al volante con opciones como el techo solar o el control de tracción.
¿Tienes más preguntas sobre el Seat Córdoba ’96? ¡Sigue explorando o pregúntanos!
Descubre cómo se comportaba el Seat Córdoba en carretera mirando los vídeos de época. ¡Pura nostalgia!
En su momento, el lanzamiento del Seat Córdoba causó revuelo como una apuesta sólida en la gama media.
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El Seat Córdoba de 1996 ofrecía una variedad de motores de gasolina y diésel. En la gama de los de gasolina, las cilindradas iban desde 1.4 hasta 2.0 litros, con potencias que variaban aproximadamente entre 60 y 150 CV. En los diésel, las cilindradas oscilaban entre 1.9 litros con opciones de motores atmosféricos o turboalimentados.
El Seat Córdoba de 1996 estaba disponible en varias opciones de carrocería, incluyendo la versión sedán, el coupé (conocido como Córdoba SX) y la variante familiar denominada Córdoba Vario.
El Seat Córdoba de 1996 se ofrecía con transmisiones manuales de 5 velocidades o automáticas, dependiendo de la versión y el motor seleccionado.
La velocidad máxima del Seat Córdoba de 1996 variaba según la motorización, con un rango aproximado de 160 a 220 km/h.
La eficiencia de combustible del Seat Córdoba de 1996 dependía del tipo de motor y transmisión, con rangos de consumo que podían ir de 5 a 9 litros por 100 km en condiciones óptimas de conducción.
El Seat Córdoba de 1996 contaba con sistemas de seguridad básicos para la época, incluyendo airbags frontales, cinturones de seguridad con pretensores y sistema de frenos con ABS en algunas versiones.
El Seat Córdoba de 1996 ofrecía diferentes niveles de acabado, con opciones de personalización que incluían diversos tipos de tapicería, colores exteriores, llantas de aleación y equipamiento adicional como aire acondicionado, sistema de audio y techo solar en algunas variantes.