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El Renault 21, lanzado en 1986, se presentó como una solución versátil y robusta para el mercado de berlinas. Destacó por su amplia gama de motorizaciones y configuraciones de equipamiento que se adaptaban a distintas necesidades y presupuestos. Se caracterizó por su diseño equilibrado, una notable confortabilidad en la conducción y un habitáculo espacioso. La seguridad y la tecnología también formaron parte de sus atributos, consolidándose como un vehículo confiable y competitivo en su segmento.
El R21 llegaba para todos los gustos. Te podías hacer con una práctica berlina, el familiar Nevada para ir a lo grande, o si te sentías deportivo, el seductor 21 2 Litros Turbo. Todas molaban.
Desde su debut en 1986, el Renault 21 se forjó un nombre por su fiabilidad y versatilidad. A lo largo de su historia, fue actualizando su estética y mecánica con restylings que lo mantuvieron en voga. El punto álgido llegó con el lanzamiento del dinámico 21 Turbo en 1987, presentando innovaciones mecánicas y un nivel de prestaciones que elevó la percepción del modelo. Su producción continuó a buen ritmo hasta el final de su ciclo en la primera mitad de los 90.
El Renault 21 se ofertó con diferentes versiones: las básicas TL, TS y GTS, el eficiente Diesel, el equilibrado GTX y el potente Turbo. Diversidad para todo tipo de conductor.
Comodidad9,2
Seguridad9,1
Calidad/Precio9,2
Diseño9,3
En su lanzamiento, el Renault 21 ofrecía una excelente relación calidad-precio, estrategia que contribuyó a su popularidad. Con variantes que iban desde el accesible modelo de entrada TL hasta el más exclusivo y potente 21 Turbo, había una opción para cada bolsillo. Los precios se escalonaban para competir tanto en el mercado de coches económicos como en el de los más exigentes que buscaban prestaciones superiores.
La ficha técnica del Renault 21 destacaba por presentar un sinfín de motorizaciones y acabados, desde los más modestos hasta los más lujosos. Sus medidas aseguraban un espacio cómodo para los pasajeros y una capacidad de carga adecuada en sus diferentes formatos de carrocería, equilibrando confort y funcionalidad.
Una gama de colores sólidos y metalizados permitía personalizar el Renault 21 al gusto del cliente, adaptándose a las tendencias y preferencias de la época.
Las llantas del Renault 21 variaban según la versión, desde las más sencillas en chapa con embellecedores hasta las aleaciones ligeras que otorgaban un look más deportivo y refinado.
El interior del Renault 21 destacaba por su confort y funcionalidad. Los asientos venían tapizados en materiales resistentes, pensados para el uso diario, ofreciendo un buen soporte lumbar. La tapicería, aunque sencilla, proyectaba una imagen de durabilidad y confort, características apreciadas por los conductores de la época.
Aunque los estándares de seguridad de 1986 no son comparables con los actuales, el Renault 21 incorporaba elementos considerados avanzados para su tiempo. Incluyó refuerzos en la carrocería, cinturones de seguridad y un diseño estructural que pretendía ofrecer una mayor protección a sus ocupantes en caso de colisión.
Para la época de su lanzamiento, el Renault 21 contaba con un sistema de audio funcional. Pese a que la conectividad no era un término tan difundido como en la actualidad, ofrecía una radio AM/FM y un cassette con altavoces que proporcionaban entretenimiento y noticias durante el viaje.
Los opcionales exteriores eran signo de personalización y prestigio.
Combinaciones de equipamiento opcional se ofrecían en paquetes que mejoraban el confort o el aspecto del vehículo, según las preferencias del cliente.
Además, se podían añadir mejoras en el sistema de audio y tapicería de mayor calidad, para personalizar aún más el Renault 21.
El cálculo de seguro para un vehículo clásico como el Renault 21 tiene particularidades especiales. Es importante considerar la antigüedad del vehículo, su estado de conservación y la disponibilidad de piezas de repuesto. Un seguro a todo riesgo no suele ser la opción más económica, pero existen pólizas específicas para coches clásicos que ofrecen una cobertura adaptada a un coste más ajustado.
Entre los modelos contemporáneos al Renault 21 se encuentran el Ford Sierra, el Opel Vectra y el Peugeot 405, todos ellos con opciones y características que competían en el mercado de berlinas de la década de los ’80.
Las variantes del Renault 21 ofrecían un rango de potencia que iba desde los 64 CV en los modelos más básicos hasta aproximadamente 175 CV en las versiones más deportivas como el Renault 21 Turbo.
El Renault 21 se ofreció con diversas motorizaciones que incluían motores de gasolina de 4 cilindros, tanto en configuraciones atmosféricas como turboalimentadas, y motores diésel, también de 4 cilindros, con diferentes cilindradas que iban desde 1.7 hasta 2.2 litros.
La velocidad máxima del Renault 21 variaba según la versión y motorización, oscilando generalmente entre los 160 km/h para los modelos básicos y alrededor de 225 km/h para el modelo 21 Turbo.
Para el Renault 21, las opciones de transmisión incluían versiones manuales de 4 y 5 velocidades, así como una opción de transmisión automática.
El Renault 21 se diseñó con un espacioso interior, ofreciendo comodidad para 5 pasajeros y contando con una configuración de asientos 2+3 en todas sus variantes.
Sí, el Renault 21 se fabricó también en versiones familiares o station wagon, conocidas como Renault 21 Nevada, que ofrecían mayor espacio de carga manteniendo las prestaciones y comodidad del modelo sedán.
El Renault 21, dependiendo del año y la versión, podía incluir equipamiento de seguridad como cinturones de seguridad delanteros y traseros, barras de protección lateral en las puertas y, en algunas versiones superiores, sistema de frenos ABS.