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El Renault 18 se lanzó al mercado en 1978 como un vehículo de gama media, buscando reemplazar al Renault 12 con una propuesta más moderna y sofisticada. Este modelo se caracterizó por su diseño equilibrado y funcional, orientado tanto para el uso familiar como para ejecutivos. Disponible inicialmente con una gama de motores que permitían una conducción suave y eficaz, el Renault 18 ganó popularidad por su confort, capacidad de carga y la confiabilidad mecánica que ofrecía. Su interior era espacioso y estaba diseñado con materiales de calidad que resistían el paso del tiempo, algo que los usuarios valoraban altamente.
El Renault 18 llegó con diferentes variantes de carrocería que ampliaron su atractivo en el mercado:
Desde su lanzamiento en 1979, el Renault 18 se convirtió en un referente dentro de su segmento. A lo largo de los años, experimentó actualizaciones que mantenían su competitividad, con mejoras en motores, seguridad y confort. Fue un vehículo que marcó una época y se mantuvo en producción durante una década, adaptándose a los cambios del mercado automovilístico.
El Renault 18 se ofreció en diversas versiones, que incluyeron el básico TL, el más equipado TS y el lujoso GTS. Más adelante, se sumaron el GTL, el Turbo y versiones diésel, ampliando la gama y ofreciendo una versión para cada tipo de cliente. Se distinguió la versión GTX, que añadía un toque deportivo al modelo. A estas se sumó la versión 4×4 denominada “American”, una rara variante con tracción integral diseñada para mercados específicos como el argentino.
La gama del Renault 18 incorporaba motores de cuatro cilindros, opciones de transmisión automática y manual, y un equipamiento que evolucionó para incluir aire acondicionado, elevalunas eléctricos y un acabado interior más refinado.
Comodidad9,1
Seguridad8,9
Calidad/Precio8,8
Diseño8,6
En el momento de su lanzamiento, el Renault 18 se posicionaba con una excelente relación calidad-precio, compitiendo directamente con otros sedanes de su clase. A lo largo de su vida útil, el precio varió según las versiones y el nivel de equipamiento. Los modelos básicos eran accesibles para un amplio rango de consumidores, mientras que las versiones más equipadas y potentes, como el GTS o el Turbo, requerían una inversión mayor. En el mercado de ocasión, los precios del Renault 18 han variado notablemente, encontrándose unidades en distintos estados de conservación y con valores que reflejan su condición actual y su valor como clásico.
Cada variante del Renault 18 tenía su ficha técnica que detallaba las especificaciones de motorización, medidas de carrocería, capacidad de carga y habitabilidad. Los acabados fueron mejorando con el tiempo, incluyendo más elementos de confort y seguridad, haciendo del Renault 18 un coche cada vez más completo.
El exterior del Renault 18 se ofrecía en una paleta de colores que variaba con las tendencias de la época. Los colores disponibles iban desde los tonos sobrios como el gris y el azul oscuro, hasta los más vivos y atrevidos como el rojo y el verde. La calidad de la pintura era notable, proporcionando al vehículo una buena resistencia al paso del tiempo y a las inclemencias del clima. Esta variedad en pinturas y colores permitía personalizar el vehículo según el gusto del cliente, haciendo cada coche único.
Las llantas del Renault 18 eran un elemento clave en su diseño. Inicialmente, el modelo venía equipado con llantas de acero decoradas con tapacubos. Con el paso de los años y en versiones más deportivas y lujosas, se introdujeron llantas de aleación ligera con diseños más modernos y atractivos. Estas no solo mejoraban la estética del vehículo sino que también contribuían a una mejor dinámica de conducción gracias a su menor peso.
El Renault 18 se destacó por su interior confortable y funcional, adaptado a las necesidades de la época. Los asientos ofrecían una buena sujeción y la tapicería, disponible en diferentes materiales y diseños, resaltaba por su durabilidad y comodidad. Espaciosos y acogedores, estos interiores estaban pensados para largos viajes, haciendo del Renault 18 una opción ideal para familias y viajeros frecuentes.
La seguridad en el Renault 18 estaba garantizada por su construcción robusta y elementos de seguridad activa y pasiva que empezaban a ser estándar para la época. Aunque carecía de los avanzados sistemas de hoy, ofrecía una protección básica efectiva.
En la era del Renault 18, la conectividad y el audio eran bastante rudimentarios comparados con los estándares actuales. Sin embargo, el modelo contaba con una radio AM/FM que era un complemento valioso para la experiencia de conducción. Los altavoces proporcionaban una calidad de sonido aceptable, y para muchos, la posibilidad de escuchar música o las noticias durante el viaje era un auténtico lujo. Con el tiempo, aparecieron opciones de caseteras y otros avances que mejoraron el entretenimiento a bordo.
Entre los opcionales exteriores, el Renault 18 ofrecía distintas combinaciones de colores y acabados que permitían personalizar el vehículo al gusto del cliente. Se podían elegir desde llantas de diseño específico hasta faros antiniebla, pasando por diversos ornamentos que aumentaban el atractivo del coche en la carretera.
Para el interior, los opcionales incluían mejoras en los sistemas de audio, tapizados de mayor calidad y elementos decorativos adicionales. Los clientes podían optar por detalles que incrementaban la sensación de lujo y confort dentro del habitáculo, como relojes analógicos o inserciones de madera.
Los paquetes opcionales del Renault 18 permitían a los compradores adquirir grupos de mejoras a un precio más ventajoso, agrupando opciones estéticas y de confort en distintas combinaciones que mejoraban la experiencia de conducción.
El enfoque de opciones del Renault 18 también permitía agregar componentes técnicos como sistemas de frenos mejorados o suspensiones ajustadas para un manejo más deportivo. Dichas adiciones resultaban atractivas para aquellos usuarios interesados en personalizar aún más su coche.
Al considerar un seguro para el Renault 18, es importante evaluar la antigüedad del vehículo y su valor como coche clásico, lo que puede influir significativamente en la prima.
El Renault 18 ofrecía una gama de motorizaciones que variaban de 1.4 a 2.2 litros, con potencias que iban aproximadamente desde los 65 CV hasta los 110 CV, dependiendo del modelo y del año de fabricación.
La velocidad máxima del Renault 18 podía oscilar entre los 150 km/h y los 180 km/h, en función de la versión y las especificaciones del motor.
El Renault 18 venía equipado con transmisiones manuales de 4 o 5 velocidades, y en algunas versiones, también estaba disponible una transmisión automática de 3 velocidades.
El depósito de combustible del Renault 18 tenía una capacidad que podía variar entre 50 y 60 litros, dependiendo del modelo y el tipo de carrocería.
Sí, existieron versiones más deportivas del Renault 18 como el R18 Turbo, que ofrecía mayores prestaciones gracias a su motor turboalimentado.
El Renault 18 incorporaba elementos de seguridad como frenos de disco delanteros, cinturones de seguridad y, en versiones posteriores, se incluyeron mejoras como frenos con sistema antibloqueo (ABS) y refuerzos en la carrocería.
Sí, el Renault 18 fue bastante popular en su tiempo, destacando por su confort, amplitud interior y una buena relación calidad-precio, lo que lo hizo un modelo frecuente en las carreteras de varios países.