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Origen | Alemania |
Producción | Desde 1964 |
Configuración | Motor trasero, tracción trasera |
Motorización | 6 cilindros bóxer |
Carrocería | Coupé |
Diseño | Ferdinand “Butzi” Porsche |
El Porsche 911 ha ofrecido una amplia gama de variantes de carrocería para satisfacer diferentes preferencias y necesidades. Desde el emblemático coupé hasta los apreciados modelos Targa, con su distintivo techo extraíble, y los cabriolets, para aquellos que buscan la experiencia al aire libre. Cada variante ha mantenido la silueta inconfundible y la deportividad inherente al 911.
Desde su lanzamiento en 1964, el Porsche 911 ha evolucionado constantemente, adaptándose a nuevas tecnologías y tendencias, sin perder su esencia y manteniendo su estatus de icono.
A lo largo de los años, el Porsche 911 ha presentado varios modelos que destacan por su rendimiento y diseño. Desde las versiones básicas hasta las más potentes, como el Carrera, el Turbo o el GT3, cada modelo ofrece una experiencia única. El 911 es más que un coche; es una declaración de principios en el mundo del automovilismo.
Diseño | Icono atemporal |
Prestaciones | Alto rendimiento |
Tecnología | A la vanguardia |
Confort | Premium |
Seguridad | De serie |
Comodidad8,9
Seguridad9,0
Calidad/Precio9,2
Diseño9,0
El Porsche 911 de 1964 comenzó estableciendo un nuevo estándar de lujo y desempeño en deportivos, reflejado en su precio premium.
Las fichas técnicas del Porsche 911 de 1964 revelan un vehículo avanzado para su época, con acabados de calidad y medidas pensadas para el desempeño.
El 911 de 1964 se ofrecía en una gama de pinturas y colores que realzaban sus líneas elegantes y deportivas.
Las llantas del Porsche 911 siempre han jugado un papel crucial en su estética y rendimiento. Diseñadas específicamente para complementar la dinámica y la deportividad del vehículo, las opciones de llantas disponibles en 1964 ofrecían no solo un aspecto distintivo sino también una contribución significativa a la experiencia de conducción. Con una selección de diseños y tamaños, cada juego de llantas estaba pensado para maximizar la adherencia y la estabilidad, manteniendo el compromiso de Porsche con la seguridad y el placer de conducción. La elección correcta de llantas influía en la maniobrabilidad y la estética, subrayando la importancia de este componente en un coche de alto calibre como el 911.
El interior del Porsche 911 (1964) es sinónimo de elegancia y funcionalidad. Los asientos deportivos están diseñados para ofrecer máximo confort y sujeción, incluso en las situaciones de conducción más exigentes. Las tapicerías, confeccionadas con materiales de alta calidad, reflejan la exclusividad de la marca. Cada detalle es cuidadosamente seleccionado para proporcionar una experiencia única:
Desde su concepción, el Porsche 911 (1964) fue dotado con innovaciones en seguridad que destacaban en su tiempo. El vehículo incorporaba cinturones de seguridad, una estructura resistente para protección en caso de colisión y una buena visibilidad panorámica que permitía al conductor mantener el control en todo momento.
Aunque el Porsche 911 (1964) es un clásico, su sistema de audio era adelantado para la época. El coche ofrecía una radio AM/FM que permitía a los pasajeros disfrutar de música y noticias durante el viaje.
Para personalizar aún más el Porsche 911 (1964), existían opciones exteriores que añadían atractivo y funcionalidad. Los clientes podían escoger entre diferentes tipos de llantas, colores de pintura exclusivos y elementos como faros antiniebla para mejorar la visibilidad. Cada opción estaba pensada para realzar el carácter único del vehículo.
En el ámbito interno, el Porsche 911 (1964) podía ser enriquecido con opciones de lujo y tecnología. Elementos como el volante deportivo, diferentes estilos de tapicería y accesorios de madera o aluminio estaban disponibles para aquellos que buscaban personalización y exclusividad.
Los paquetes opcionales del Porsche 911 (1964) estaban concebidos para proporcionar una experiencia más completa y a medida. Incluían mejoras en el performance, como suspensiones ajustadas para una respuesta más ágil, y en el confort, con climatizadores y sistemas de sonido mejorados. Era posible configurar un 911 verdaderamente personalizado.
El abanico de opciones del Porsche 911 (1964) permitía adaptar el coche a los deseos y necesidades de cada cliente. Entre estas opciones, se encontraban sistemas de escape deportivos y frenos mejorados, que no solo incrementaban el rendimiento sino también el placer de la conducción deportiva.
Calcular el seguro de un vehículo como el Porsche 911 (1964) requiere prestar atención a los factores que influirán en la cotización. Aquí presentamos una tabla con los detalles técnicos que se deben considerar:
Valor del vehículo: | Estado de conservación y originalidad |
Historial del coche: | Importancia del mantenimiento y restauraciones |
Uso del vehículo: | Uso diario, exhibición o competición |
Cobertura deseada: | Tipo de seguro (a terceros, todo riesgo, etc.) |
Perfil del conductor: | Edad y experiencia al volante |
Esencial es contemplar los kilómetros recorridos, modificaciones estructurales y la posibilidad de piezas originales en la cotización del seguro.
Los modelos Porsche 911 de 1964 ofrecen un rango de potencia que va desde los 130 CV hasta los 160 CV, dependiendo de la variante específica y las modificaciones realizadas.
Los motores de los Porsche 911 de los años 60 tienen una cilindrada que oscila entre 2.0 y 2.2 litros, variando según el modelo y el año de fabricación.
El Porsche 911 de 1964 tiene un total de 4 asientos, aunque los asientos traseros son más apropiados para uso ocasional o para niños, dadas sus dimensiones reducidas.
El Porsche 911 de 1964 puede alcanzar una velocidad máxima que varía entre 210 km/h y 230 km/h, dependiendo de la versión especifica del modelo y su configuración.
Los Porsche 911 de 1964 venían equipados con una transmisión manual de 5 velocidades, diseñada para ofrecer una experiencia de conducción deportiva y precisa.
Los Porsche 911 de la primera generación, incluyendo los de 1964, tienen tracción trasera, lo cual es una característica distintiva de la marca y contribuye a su comportamiento deportivo.
Para la época, el Porsche 911 de 1964 incorporaba innovaciones tecnológicas como frenos de disco en las cuatro ruedas y una suspensión trasera independiente que mejoraba tanto la seguridad como el confort al conducir.