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El Opel Commodore de 1972 es un vehículo que destaca por su robusta elegancia y prestaciones mejoradas respecto a su predecesor, el Rekord. Equipado con motores de seis cilindros y una oferta de cambios manuales y automáticos, el Commodore se consolidó como una opción premium dentro de la gama media-alta. Entre sus cualidades se incluyen:
Variantes | Descripción |
---|---|
Coupé | Deportividad con un diseño más sofisticado. |
Berlina | Confort y espacio para toda la familia. |
En 1972, el Opel Commodore atravesaba su segunda generación, conocida como Commodore B, que había sido introducida en 1972, y que continuó su producción hasta 1977. Este modelo trajo consigo importantes mejoras en diseño y mecánica, como una suspensión más confortable y motores más potentes que iban desde los 2.5L hasta los 2.8L. Los modelos de 1972 se beneficiaron de un chasis mejorado sobre el anterior Rekord, sumando así un toque de exclusividad y rendimiento. El Commodore, en este año en particular, representó el compromiso de Opel con la calidad y la innovación automotriz.
Modelo | Motor | Potencia |
---|---|---|
Commodore 2.5 | 2.5L | 115 CV |
Commodore 2.5 GS | 2.5L | 130 CV |
Commodore 2.8 GS/E | 2.8L | 160 CV |
El Opel Commodore se caracteriza por ofrecer una experiencia de conducción equilibrada, con aspectos remarcables como:
Comodidad9,1
Seguridad9,1
Calidad/Precio9,3
Diseño9,2
Los precios del Opel Commodore de 1972 reflejaban su posicionamiento como una opción más lujosa frente a otros modelos de la marca. Aunque los precios exactos varían dependiendo del estado del vehículo y del mercado de coleccionistas actual, en su año de lanzamiento, el Commodore presentaba un coste notablemente superior al Rekord, justificado por sus mejores prestaciones y mayor equipamiento estándar. Hoy en día, su valor como clásico puede ser significativamente mayor, especialmente para unidades bien conservadas o restauradas.
Las fichas técnicas del Opel Commodore de 1972 detallan información clave sobre sus capacidades y dimensiones. Entre ellos, destacan el peso, la longitud, la altura y la anchura del vehículo, así como las especificaciones de motor y rendimiento. Estos detalles son cruciales para los entusiastas y coleccionistas, y son parte de lo que se evalúa al considerar el estado y autenticidad de un vehículo clásico como el Commodore.
El Opel Commodore de 1972 ofrecía una gama de colores que se alineaban con los estilos de la época, incluyendo tonos sobrios y elegantes, así como opciones más vivas y llamativas. La calidad de la pintura y su durabilidad son aspectos destacados por los propietarios y restauradores, pues un acabado original bien conservado puede aumentar el valor del vehículo considerablemente. Los colores y las pinturas juegan un papel importante en la autenticidad y el atractivo estético del Commodore.
Las llantas del Opel Commodore de 1972 eran parte integrante del atractivo visual del coche. Disponibles en distintos diseños y acabados, contribuían a la estética general y al rendimiento del vehículo. Las dimensiones y el tipo de llanta eran seleccionados para complementar el desempeño del motor y la suspensión, mejorando la maniobrabilidad y la estabilidad. Mantener las llantas originales o restaurarlas a su especificación de fábrica es un elemento importante para los aficionados y coleccionistas, ya que preserva el aspecto clásico y mejora la autenticidad del Commodore.
Adentrarse en el interior del Opel Commodore de 1972 es sumergirse en un ambiente que combina comodidad clásica y elegancia. Los asientos, diseñados tanto para el conductor como para los pasajeros, ofrecen una experiencia de viaje placentera, con tapicerías que reflejan la calidad y el cuidado en cada detalle. La selección de materiales, desde el tejido hasta la piel opcional, hace que cada trayecto sea un verdadero placer. La ergonomía y el soporte lumbar se han tenido en cuenta para maximizar la comodidad en largas distancias, haciendo del Opel Commodore un referente en su época.
A bordo del Opel Commodore, la seguridad es una constante. A pesar de ser un modelo de otra época, incorporaba elementos de seguridad activa y pasiva innovadores para su tiempo. La estructura reforzada, los cinturones de seguridad y un sistema de frenos eficiente son testamento del compromiso de Opel con la protección de sus ocupantes.
Aunque la tecnología de conectividad moderna no estaba presente en 1972, el Opel Commodore ofrecía un sistema de audio que permitía disfrutar de la música durante el viaje con claridad y fidelidad, a través de su radio AM/FM y el reproductor de casetes opcional.
Los opcionales exteriores incluyen llantas de aleación, faros antiniebla y una variedad de colores de carrocería.
Dentro de los opcionales interiores se contemplan volante de cuero y insertos de madera.
Los paquetes opcionales mejoraban la ya completa experiencia del Opel Commodore, añadiendo elementos como aire acondicionado, paquete de cromados y mejoras en el sistema de sonido para los más exigentes.
El Opel Commodore de 1972 ofrecía una gama de opcionales para personalizar cada vehículo. Desde techo solar hasta tapicería de piel, pasando por mejoras en la suspensión, cada conductor podía hacer su Commodore único.
Para calcular el seguro del Opel Commodore de 1972, es importante considerar el valor histórico del vehículo, así como su estado de conservación y uso.
El Opel Commodore de 1972 ofrecía varias opciones de motorización, con cilindradas que iban desde los 2.5 litros hasta los 2.8 litros, y potencias que oscilaban entre los 115 y 160 CV aproximadamente.
La velocidad máxima del Opel Commodore de 1972 podía variar según la versión del motor, pero en general, se situaba en un rango aproximado de entre 175 y 200 km/h.
El Opel Commodore de 1972 estaba disponible tanto con transmisiones manuales de 4 velocidades como con opciones de transmisión automática.
El Opel Commodore de 1972 estaba diseñado para acomodar a cinco pasajeros, incluyendo al conductor, con una configuración de asientos 2+3.
El Opel Commodore de 1972 estaba disponible en variantes de carrocería que incluían el sedán de cuatro puertas y el coupé de dos puertas.
Para los estándares de la época, el Opel Commodore de 1972 contaba con características de seguridad básicas, pero no incluía sistemas de seguridad modernos como los conocemos hoy, como airbags o control de estabilidad.
El consumo medio de combustible del Opel Commodore de 1972 varía según el modelo y las condiciones de conducción, pero generalmente se esperaba que estuviera en torno a los 10 a 15 litros por cada 100 kilómetros.