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Motor | V8 5.7 litros Gen III LS1 |
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Potencia | Hasta 255 kW (342 hp) |
Par motor | 475 Nm |
Transmisión | Manual de 6 velocidades / Automática de 4 velocidades |
Tracción | Trasera |
0-100 km/h | Menos de 6 segundos |
Peso | Alrededor de 1.650 kg |
La serie Clubsport de HSV (Holden Special Vehicles) entregó en el año 2000 un coche deportivo con un alto rendimiento y estética distintiva. Con su imponente motor V8, el HSV Clubsport se presentó como la opción performance del Commodore, con un enfoque en el manejo y la aceleración.
El HSV Clubsport del 2000 se ofrecía en diferentes sabores, cada uno con su propio carácter. Estaba el robusto Clubsport R8, que añadía esa chispa de lujo y equipamiento extra. La gracia de estas variantes residía en adaptarse tanto al conductor que quería un aspecto más discreto como al que deseaba todas las campanas y silbatos.
El año 2000 fue especial para el HSV Clubsport, consolidándose como un titán en el segmento de los muscles cars australianos. Con mejoras en rendimiento y comodidad, este modelo continuó con la tradición de HSV de coches enfocados en el disfrute del conductor y el rendimiento en carretera. Esta generación marcó un hito en la evolución del modelo hacia una propuesta más refinada pero sin perder su esencia de poder y presencia.
A lo largo de su historia, el HSV Clubsport ha tenido varias versiones, partiendo del modelo base hasta alcanzar la cumbre con el R8. Cada versión se diferenciaba por su nivel de equipamiento, acabados y, por supuesto, mejoras mecánicas.
– Motor V8 potente
– Estabilidad y agarre notables
– Interiores con acabados deportivos
– Suspensiones optimizadas para un manejo deportivo
– Diseño exterior agresivo y llamativo
Comodidad9,6
Seguridad9,3
Calidad/Precio9,4
Diseño9,6
El precio del HSV Clubsport en el año 2000 reflejaba su posicionamiento como un coche de altas prestaciones. A pesar de ser elevado, se justificaba por la calidad de ingeniería y el rendimiento sobresaliente que ofrecía.
La ficha técnica del HSV Clubsport del 2000 muestra un coche amplio y sólido, con dimensiones que exaltan su presencia en carretera. Los acabados internos y externos eran de alta calidad, reflejando la deportividad y el lujo que caracterizan a la marca.
La gama de colores ofrecida en el HSV Clubsport era variada y procuraba acentuar su diseño agresivo. Desde el clásico Heron White hasta el impactante Sting Red, cada pintura destacaba las líneas musculosas del vehículo.
Las llantas del HSV Clubsport no eran solo un complemento estético; eran parte integral de su identidad y rendimiento. Opciones de 18 pulgadas, con diseños distintivos y deportivos, no sólo mejoraban el aspecto sino que también ofrecían mejoras en el agarre y la respuesta en carretera. La elección de neumáticos era igualmente importante, optando por marcas reconocidas que aseguraban la máxima adherencia en todo momento.
Cuando te tiras en los asientos del HSV Clubsport del 2000, chaval, es como decirle adiós a la realidad. A ver, te cuento lo que tienes:
En seguridad, el HSV Clubsport de 2000 no es ningún juguete. Viene cargadito de cosas serias, como:
En cuanto le das al play, flipas:
Entre los opcionales exteriores, se destacan las llantas de aleación de diseño exclusivo y acabados personalizables.
Los opcionales interiores incluyen un sistema de navegación avanzado y detalles en fibra de carbono.
Los paquetes opcionales mejoran la experiencia ofreciendo desde mejoras en rendimiento hasta personalizaciones de lujo y estilo.
Realmente, donde este bicho se sale es en los opcionales. Puedes convertir tu Clubsport en una bestia única. Imagina poder elegir entre diferentes paquetes de rendimiento que ponen el coche a tope de potencia, o ir a por un acabado que deje a tus colegas boquiabiertos. Por dentro, puedes meterle desde un techo solar panorámico que te deje ver el cielo, hasta un sistema de infoentretenimiento que te haga sentir como en el cine. Y no te olvides de las ayudas a la conducción, que a veces uno no es tan Schumacher como piensa.
Si buscas vídeos y pruebas del HSV Clubsport del 2000, YouTube está lleno de reviews y test drives que te quitarán el hipo.
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Para calcular el seguro del HSV Clubsport del 2000, es clave tener en cuenta sus prestaciones y potencia. La cilindrada y la aceleración son factores que pueden variar el precio del seguro. Además, se considera el uso que le das al coche, ya sea para pasear los fines de semana o para quemar rueda en el circuito.
Si andas buscando coches parecidos al HSV Clubsport del 2000, puedes echarle un vistazo a los modelos de las gamas Ford Performance Vehicles o las versiones más radicales de Holden Commodore.
El HSV Clubsport del año 2000 cuenta con un motor V8 que ofrece un rango de potencia entre los 250 y 300 CV, dependiendo de la variante específica.
La cilindrada del HSV Clubsport de 2000 varía en torno a los 5.0 a 5.7 litros, en función de la versión del modelo.
El HSV Clubsport ofrece una configuración de cinco asientos, brindando así espacio tanto para el conductor como para cuatro pasajeros.
La velocidad máxima del HSV Clubsport puede oscilar entre los 250 km/h y los 280 km/h, dependiendo del modelo y las modificaciones específicas.
El HSV Clubsport de 2000 puede encontrarse tanto con transmisión manual como automática, dependiendo de la variante elegida.
Sí, el HSV Clubsport incluye ediciones especiales y limitadas que ofrecen características y rendimiento mejorado, con detalles exclusivos en diseño y equipamiento.
El consumo de combustible del HSV Clubsport de 2000 varía, pero se sitúa en un rango aproximado de 12 a 15 litros cada 100 km, dependiendo del estilo de conducción y las condiciones de uso.