El Ford Granada de 1977 se consolida como un vehículo de alto calibre dentro de la gama media-alta de la época. Destacado por su construcción sólida y su diseño de corte elegante, el Granada ofrece una experiencia de conducción refinada. Equipado con una gama de motores que van desde el eficiente 2.3 litros hasta el potente V6 de 3.0 litros, el modelo se adapta tanto al uso diario como a las exigencias de un viaje largo. Su transmisión manual o automática, sumado a un interior confortable con acabados de calidad, reflejan la dedicación de Ford por combinar rendimiento y comodidad.
El Ford Granada de 1977 se presentó en diversas variantes de carrocería, adaptándose a las necesidades de cada cliente. Disponible en versión sedán de dos y cuatro puertas, así como en una espaciosa carrocería familiar, cada modelo promete satisfacer tanto en estética como en funcionalidad. La versión coupé destaca por su silueta más deportiva y elegante, mientras que el sedán y el familiar ofrecen una habitabilidad y versatilidad mayores, ideales para familias o profesionales. Con opciones de acabado que varían desde lo estándar a lo lujoso, el Granada se posiciona como un vehículo versátil y atractivo.
El Ford Granada de 1977 simboliza un hito importante en la evolución de la marca, marcando una era de diseño y tecnología avanzada para su tiempo.
El Ford Granada de 1977 se ofreció en varias versiones, cada una con su propio conjunto de características y opciones. Los modelos básicos comenzaban con el nivel de equipamiento L, seguidos de los más equipados GL y el lujoso Ghia, que ofrecía un nivel de refinamiento superior. La gama se complementaba con el deportivo Granada Coupé y el pragmático Granada Estate, pensado para aquellos que necesitaban un mayor espacio de carga. Cada versión estaba disponible con distintas motorizaciones y opciones de transmisión, permitiendo a los compradores personalizar su vehículo de acuerdo a sus preferencias y necesidades.
El Ford Granada de 1977 destaca por su amplio interior y su maletero de generosas dimensiones. Con un diseño que enfatiza la comodidad y el lujo, los asientos ergonómicos y el uso de materiales de calidad ofrecen una experiencia superior al volante. La suspensión equilibrada, junto con una dirección precisa, garantizan una conducción suave y segura. Disponible en una amplia gama de motores, el Granada se adapta a una variedad de estilos de conducción y necesidades, consolidándose como una opción robusta y confiable.
Comodidad8,8
Seguridad8,8
Calidad/Precio9,5
Diseño9,4
El precio del Ford Granada 1977 variaba significativamente dependiendo de la versión y el nivel de equipamiento elegido. Los modelos base comenzaban con un precio asequible, brindando una excelente relación calidad-precio para aquellos que buscaban un coche fiable y bien construido. Por otro lado, las versiones Ghia representaban la punta de lanza en cuanto a lujo y prestaciones, con un costo adicional que reflejaba su mayor nivel de refinamiento y equipamiento. Además, opciones como aire acondicionado, tapicería de cuero y sistemas de sonido mejorados podían incrementar el precio final del vehículo.
Las fichas técnicas del Ford Granada 1977 destacan la variedad de acabados y medidas, ofreciendo una detallada descripción de las especificaciones para cada versión del modelo.
La gama de pinturas y colores disponibles para el Ford Granada de 1977 era variada, permitiendo a los clientes elegir entre tonos sobrios y elegantes o más atrevidos y llamativos. La pintura de alta calidad aseguraba un acabado brillante y una mayor resistencia al paso del tiempo y a las inclemencias del clima. Estas opciones de personalización exterior reforzaban el atractivo del Granada en el mercado, destacando su presencia en la carretera y subrayando la identidad del propietario.
Las llantas del Ford Granada 1977 no solo eran un elemento estético, sino que también contribuían a la seguridad y al rendimiento del vehículo. Disponibles en distintos diseños y tamaños, las llantas de aleación ligera opcionales ofrecían una mejora en la conducción y una reducción del peso no suspendido, lo que repercutía positivamente en la dinámica del coche. Además, la selección de neumáticos de alta calidad garantizaba un agarre óptimo en distintas condiciones de carretera, ofreciendo así tranquilidad y control al conductor.
El Granada de ’77 te envuelve en un ambiente retro auténtico. Imagina estar ahí, en asientos de mullido confort, tapizados en telas que respiran los ’70. Del básico al cuero, cada opción tenía su encanto. Para la época, un lujo: reposacabezas que protegen y apoyabrazos que invitan a la relajación.
Aunque los estándares de seguridad han evolucionado mucho desde entonces, el Ford Granada ’77 incorporaba medidas de seguridad significativas para su tiempo: estructura resistente, cinturones de seguridad retractiles, una discreta pero eficaz columna de dirección colapsable y, en algunos mercados, apoyo de faros antiniebla para visibilidad en condiciones adversas. Siempre buscando proteger a sus ocupantes, el Granada era un precursor en precaución.
En el ’77, la conectividad era sinónimo de una buena radio AM/FM. Y el Granada no defraudaba, con su sistema de sonido básico pero funcional, algunos incluso con cassette para que llevaras tu música a todas partes.
En cuanto a opcionales, Ford ofrecía variedad: llantas de aleación, distintos tipos de pintura metálica, e incluso vinilos decorativos para la carrocería, reflejando el estilo personal de cada conductor.
Para el interior, los opcionales iban desde acabados de madera hasta elevalunas eléctricos, pasando por aire acondicionado, cuando el lujo era un extra opcional muy codiciado.
El Granada ofrecía paquetes diseñados para maximizar confort y estilo: desde el ‘L’ para lujo hasta el ‘Ghia’ con todos los extras que pudieras desear. Tecnología punta de la época, como control de crucero o paneles de madera, añadiendo un toque distintivo a una experiencia de conducción ya de por sí especial.
Si bien era una época diferente en términos de personalización, Ford proporcionaba opciones como techo solar eléctrico, diferentes tipos de ruedas, y algunos adelantos tecnológicos como el encendido sin llave, ofreciendo a cada cliente la posibilidad de tener un coche único.
Pillar un seguro para tu Granada ’77 es más fácil que encontrar una canción de los Bee Gees en una jukebox de la época. Solo necesitas los datos clásicos: año, modelo y condición. Con esos detalles, comparas opciones y encuentras ese seguro a medida que proteja tu joya de acero.
El Ford Granada de 1977 ofrece un rango de potencia que va desde aproximadamente 70 CV hasta más de 160 CV, dependiendo del modelo y del tipo de motor que se elija.
Sí, el Ford Granada de 1977 se fabricó con varias variantes de carrocería, incluyendo versiones sedán, coupé y station wagon (familiar), cada una con sus propias características y dimensiones.
El Ford Granada de 1977 contaba con una amplia gama de cilindradas, partiendo de motores de 1.7 litros y llegando hasta los 2.8 litros o más, en función del modelo y especificaciones del motor.
El Ford Granada de 1977 estaba disponible tanto con transmisión manual como automática, con variantes que iban desde las 3 hasta las 4 velocidades.
El Ford Granada de 1977 generalmente tiene capacidad para 5 pasajeros, aunque esto puede variar ligeramente en función del modelo específico y la configuración del interior.
La velocidad máxima del Ford Granada de 1977 oscila entre los 160 km/h y los 190 km/h, dependiendo del tipo de motor y la configuración del vehículo.
El consumo de combustible del Ford Granada de 1977 varía ampliamente según el motor y la carga del vehículo, pero en general, se considera que tiene un consumo moderado a elevado comparado con los estándares actuales de eficiencia.