Con el fin de ayudar al pueblo valenciano, donaremos 150€ a Cáritas por cada renting contratado por alguien nacido en Valencia, residente o afectado por la dana.
¿Quieres conocer el Ford Explorer de 1991? Este bicho vino a cambiar el juego en el mundo de los SUVs. Con un diseño robusto y una presencia que se hace notar, el Explorer de aquellos años ofrecía una mezcla ideal entre funcionalidad y confort. Era el coche perfecto para familias aventureras o para quien necesitaba un vehículo espacioso y versátil. ¿Te imaginas lanzarte a la carretera con uno de estos? ¡Pura emoción!
En 1991, el Ford Explorer se presentó con distintas caras para conquistar varios gustos. Aquí te dejo las variantes:
El ’91 fue un gran año para Ford; el Explorer se lanzó y rápidamente se ganó el corazón de los amantes de los SUVs. ¡Un clásico moderno nacía!
El Explorer del ’91 tenía varias versiones para elegir, cada una adaptada a diferentes necesidades y estilos de vida. Mira esta tabla:
El Explorer ’91 destacaba por su comodidad interior y su capacidad todoterreno. Era un vehículo que te permitía ir del asfalto a la montaña sin pestañear. Además, su amplitud interior lo hacía ideal para viajes largos.
Comodidad9,7
Seguridad8,5
Calidad/Precio8,9
Diseño9,5
En cuanto a precios, el Ford Explorer de 1991 se situaba en un rango competitivo. Ofrecía un gran valor por tu dinero, considerando su durabilidad y las prestaciones que traía de serie. Obviamente, los precios variaban según la versión y los extras, pero en general, era una apuesta segura para quien buscaba calidad y buen precio.
Para los detalles más técnicos, las fichas del Explorer del ’91 son tu mejor aliado. ¡Échales un vistazo!
En el ’91, el Explorer no solo era robustez, también venía con estilo. Podías elegir entre una paleta de colores que iba desde los clásicos hasta los más atrevidos. La pintura brillante y duradera hacía que este SUV destacase aún más, si cabe.
Las llantas del Explorer ’91 eran la guinda del pastel. No solo estaban diseñadas para afrontar cualquier terreno, sino que también añadían un toque de elegancia y deportividad al conjunto. Con ellas, sin duda, tu Explorer se hacía notar tanto en la ciudad como en caminos rurales.
Desde su lanzamiento, el Ford Explorer (1991) se destacó por ofrecer un interior espacioso y confortable. Los asientos de la versión inicial venían tapizados en distintos materiales, incluyendo opciones de tela para los modelos base y cuero para las versiones más equipadas. Eran ajustables manualmente, y en determinadas configuraciones, el asiento del conductor incluía ajuste eléctrico para garantizar una posición óptima al volante. La segunda fila de asientos podía acomodar cómodamente a tres pasajeros, y la disposición de los mismos permitía un acceso sencillo a la tercera fila en los modelos que la incorporaban.
La seguridad del Ford Explorer de 1991 estaba diseñada para cumplir con los estándares de la época. Incorporaba cinturones de seguridad en todas las plazas, y en algunos modelos, barras de protección lateral para ofrecer un extra en caso de impactos laterales. A pesar de que en esos años no se contaba con tantos sistemas de asistencia al conductor como hoy en día, el Explorer buscaba proteger a sus ocupantes con un chasis robusto y una estructura pensada para disipar la energía de los choques.
El sistema de audio del Ford Explorer original venía con una radio AM/FM y, en según qué modelos, un reproductor de cassettes. Aunque la conectividad moderna no era una característica en aquellos tiempos, ofrecía la experiencia de entretenimiento básica que se esperaba de un vehículo de su categoría. Los controles eran accesibles y diseñados para una manipulación sencilla, evitando distracciones mientras se conducía.
El Ford Explorer de 1991 brindaba diversas opciones para personalizar su aspecto exterior, incluyendo diferentes diseños de ruedas, barras de techo y protectores de faros.
Los opcionales interiores se centraban en aumentar la comodidad y la funcionalidad, con elementos como alfombrillas de mayor calidad, y sistemas de sonido mejorados.
Además, el Ford Explorer ofrecía paquetes de mejora que permitían a los compradores personalizar su vehículo. Estos paquetes incluían mejoras como suspensiones reforzadas para aquellos que buscaban una experiencia de conducción fuera de carretera más robusta, paquetes de remolque para optimizar su capacidad de arrastre, y paquetes de lujo, que sumaban prestaciones como asientos de cuero y detalles en el interior en madera y metal pulido.
Entre los opcionales más destacados se encontraban los techo solar eléctrico, un adelanto significativo para la época, y sistemas de control de crucero para los largos viajes por carretera. Estas opciones buscaban ofrecer una experiencia de conducción más agradable y menos cansada. Los sistemas de seguridad también podían ser mejorados con opciones como airbags, que empezaban a generalizarse en el mercado.
Calcular el seguro del Ford Explorer de 1991 requiere considerar su robustez y capacidad todoterreno, características que lo diferencian dentro del mercado de vehículos de época. Además, la posible inclusión de sistemas de seguridad opcionales, como airbags, pueden influir en la cotización. Las aseguradoras tendrán en cuenta la antigüedad del vehículo, pero también su reputación como un SUV fiable y versátil.
El Ford Explorer de 1991 dispone de motores que ofrecen una potencia que varía entre los 155 y 160 CV aproximadamente, dependiendo de la versión y configuración del motor.
El Ford Explorer de 1991 se ofrecía principalmente en configuraciones de carrocería tipo SUV, con variantes de dos puertas y cuatro puertas para adaptarse a diferentes necesidades y preferencias.
La cilindrada de los motores del Ford Explorer de 1991 suele estar comprendida entre los 4.0 litros, siendo esta la más común para el modelo de ese año.
El Ford Explorer de 1991 está diseñado para acomodar generalmente entre 5 y 7 pasajeros, dependiendo de la configuración del interior y si incluye o no una tercera fila de asientos.
El Ford Explorer de 1991 puede alcanzar una velocidad máxima que oscila alrededor de los 180 km/h, aunque este valor puede variar ligeramente en función del estado del vehículo y las especificaciones del motor.
El Ford Explorer de 1991 se ofrece tanto en variantes de tracción trasera como en configuraciones de tracción en las cuatro ruedas, lo que le permite adaptarse a diversos terrenos y condiciones de conducción.
El Ford Explorer de 1991 estaba equipado con transmisiones manuales de 5 velocidades o automáticas de 4 velocidades, dependiendo del modelo y las preferencias del propietario.