El Fiat 131 Gasolina, también conocido como Mirafiori, es un coche icónico que marcó una era. Lanzado en la década de los 70, evolucionó a través de tres series distintas con actualizaciones en diseño y mecánica. Con motores que iban desde los modestos 1.3 litros hasta más potentes 2.0 litros, el 131 ofrecía una mezcla intrigante de funcionalidad y diversión al volante. Su tracción trasera y una construcción relativamente liviana contribuyeron a una experiencia de conducción dinámica y atractiva para aquel entonces.
El Fiat 131, lanzado en 1974, experimentó su primera transformación en 1978 con la Serie 2, que trajo mejoras en el diseño y la ergonomía. La última serie, presentada en 1981, incluyó mejoras significativas en la carrocería y los interiores. La producción del modelo continuó hasta 1984, tiempo durante el cual el 131 se había ganado una sólida reputación por su fiabilidad y su satisfactoria respuesta al volante, especialmente las variantes deportivas, admiradas en el rally.
Dentro de la gama del Fiat 131 Gasolina, diversos modelos hicieron aparición. Desde el básico 131 Mirafiori, pasando por el más lujoso Supermirafiori, hasta llegar al deportivo 131 Abarth Rally, hubo un 131 para cada tipo de conductor. La variedad de carrocerías incluía sedanes de dos y cuatro puertas y las más funcionales variantes familiares.
Comodidad9,1
Seguridad9,0
Calidad/Precio8,9
Diseño9,3
Si estás pensando en hacerte con un trocito de historia, los precios del Fiat 131 Gasolina varían. Dependerá del estado del coche, el modelo específico y la rareza. Por ejemplo, un 131 Abarth Rallye, debido a su legado en competición, podría alcanzar precios elevados entre los coleccionistas y aficionados al motor clásico.
Investigar las fichas técnicas, acabados y medidas es fundamental antes de comprar un clásico como el Fiat 131. Dimensiones generales, tipo de suspensión, sistemas de frenado, opciones de interior y tipos de transmisión son solo algunos de los detalles que varían entre las diferentes versiones y que definen su conducción y comodidad.
La paleta de colores del Fiat 131 era bastante representativa de su tiempo, ofreciendo desde tonos sobrios hasta más llamativos.
Las llantas del Fiat 131 Gasolina son un aspecto relevante que influye en la estética y el comportamiento del coche. Dependiendo de la versión, podían encontrarse desde sencillas llantas de acero con tapacubos hasta las más deseables llantas de aleación, que aportaban un toque deportivo y mejoraban la conducción con una mayor rigidez y menor peso.
El interior del Fiat 131 se caracteriza por ofrecer un ambiente de confort sin pretensiones de lujo, pero con una funcionalidad destacable. Los asientos brindan un soporte adecuado para trayectos largos, y la tapicería, aunque sencilla, ha sido seleccionada para resistir el desgaste cotidiano.
A lo largo de su producción, el Fiat 131 ha ido incorporando mejoras esenciales en seguridad, adaptándose a los estándares de su época. Aunque no contaba con los sistemas avanzados de hoy en día, su estructura y diseño estaban enfocados en ofrecer protección y una conducción firme. Con cinturones de seguridad y una visibilidad amplia, el 131 se posicionó como un vehículo confiable para las familias.
Lanzado en una era donde la conectividad no era prioritaria, el Fiat 131 original no destacaba en este aspecto. No obstante, los modelos más recientes antes del cese de su producción intentaron incorporar mejoras en el sistema de audio, ofreciendo radios AM/FM y reproductores de casete, que para su tiempo marcaron un avance en la experiencia de viaje. Actualizaciones posteriores y personalizaciones han permitido incluir sistemas más modernos.
Entre los opcionales exteriores que se podían elegir para el Fiat 131, destacan las llantas de aleación y los distintos acabados de pintura.
En cuanto a interiores, los consumidores podían optar por mejoras en la tapicería y adicionar elementos de confort como apoyabrazos o compartimentos extra.
Fiat ofrecía paquetes que combinaban opcionales tanto de exterior como de interior, con el fin de personalizar el vehículo y aumentar su confort y estética.
Además, había una selección de opcionales como sistemas de sonido avanzados y accesorios de conveniencia para satisfacer a los compradores.
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Dentro de la gama de vehículos que comparten similitudes con el Fiat 131 Gasolina, se encuentran el Ford Escort, el Opel Ascona o el Renault 12. Todos ellos pertenecen a la misma categoría de coches familiares de tamaño medio, y fueron diseñados pensando en la utilidad y el confort para el día a día.
La potencia de los modelos de Fiat 131 Gasolina varía dependiendo de la versión y el año de fabricación, oscilando generalmente entre los 65 y los 140 CV.
Los motores del Fiat 131 Gasolina ofrecen una gama de cilindradas que van desde los 1.3 litros hasta los 2.0 litros, adaptándose a las distintas necesidades de potencia y rendimiento.
El Fiat 131 es un vehículo diseñado para albergar cómodamente a 5 pasajeros incluyendo al conductor.
La velocidad máxima del Fiat 131 Gasolina puede variar, pero generalmente se encuentra en un rango de entre 150 km/h y 190 km/h, dependiendo del modelo y las condiciones del motor.
El Fiat 131 se ofreció con varias opciones de carrocería, incluyendo versiones sedán de cuatro puertas, familiar de cinco puertas y un coupé de dos puertas.
En su época, el Fiat 131 contaba con las opciones de seguridad estándar, pero por normativas actuales podría considerarse que carece de características modernas de seguridad y asistencia a la conducción.
Sí, existen variantes deportivas más potentes del Fiat 131, como el famoso Fiat 131 Abarth, que se distingue por su mayor rendimiento y modificaciones orientadas a la competición.