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Sumérgete en la emoción de conducir un Dodge Viper 1996, una máquina de pura adrenalina. Con su motor V10 de 8.0 litros, este deportivo americano es la definición de potencia. Su diseño distintivo con líneas agresivas y una postura baja lo convierten en un auténtico ícono. El Viper no solo es una bestia en el asfalto, sino también un deleite para los sentidos, con un rugido que emociona y una aceleración que corta la respiración. Si buscas exclusividad, rendimiento y una experiencia de conducción visceral, el Viper 1996 es tu elección.
En 1996, el Dodge Viper jugaba en la liga de los grandes con dos variantes de carrocería irresistibles: el RT/10 Roadster para sentir el viento en tu cara, y el GTS Coupé si lo tuyo son las líneas más aerodinámicas y un toque de elegancia. Cada uno con su personalidad, pero ambos compartiendo la misma alma salvaje. Elige el tuyo y prepárate para girar cabezas.
El año 1996 fue especial para el Dodge Viper, marcando la llegada del Viper GTS, el hermano de techo duro que se sumaba al ya conocido RT/10 Roadster. El GTS llevó el diseño a otro nivel con su doble burbuja en el techo, brindando más espacio para cascos de carrera, ideal para los entusiastas de los circuitos. Además, 1996 trajo mejoras en rendimiento y comodidad, haciendo al Viper no solo más rápido, sino también más amigable para el uso diario. Sin duda, fue un gran año para este ícono americano.
Si hablamos de versiones, el Dodge Viper 1996 te ofrece dos sabores de pura emoción: el RT/10 Roadster, para aquellos que adoran el cielo abierto, y el más refinado pero igualmente potente GTS Coupé, que incorpora una suspensión más sofisticada y una aerodinámica mejorada. ¿Listo para elegir tu veneno?
El Viper 1996 destaca por su motor V10 de 8.0 litros con 415 cv y 664 Nm de torque. La tracción trasera y su caja manual de seis velocidades te dan el control total del animal. El chasis deportivo y la suspensión ajustada para el rendimiento te ofrecen una conducción sin concesiones.
Comodidad9,5
Seguridad9,4
Calidad/Precio9,3
Diseño9,6
En 1996, poseer un Dodge Viper era el sueño de muchos, pero solo al alcance de unos pocos. Con precios que desafiaban su exclusividad, el Viper no era solo un coche, era una declaración de intenciones. Un símbolo de poder y estatus que reflejaba la pasión por la velocidad y la ingeniería americana.
Conoce cada detalle técnico, los acabados de lujo y las medidas exactas que hacen del Viper 1996 una obra maestra de la ingeniería automotriz.
El Dodge Viper 1996 se ofrecía en una paleta de colores que realzaba sus líneas musculosas y agresivas. Desde el clásico rojo Viper hasta el elegante azul GTS, cada tono era una declaración de estilo y pasión. La pintura no solo daba personalidad sino que también protegía y destacaba las formas únicas de este deportivo.
Las llantas del Dodge Viper 1996 eran más que un componente funcional; eran una declaración estética que complementaba su diseño atrevido. Forjadas para resistir la potencia del V10, estas ruedas no solo soportaban el rendimiento extremo, sino que también proyectaban una imagen de fortaleza y deportividad. Con opciones que iban desde diseños clásicos hasta más agresivos, las llantas del Viper eran el toque final perfecto para este ícono de la carretera.
En términos de seguridad, el Dodge Viper de 1996 no contaba con las tecnologías avanzadas de hoy, pero ofrecía lo esencial para proteger a sus pasajeros. Incorporaba airbags y un robusto chasis que proporcionaba buena protección en caso de colisión. La seguridad activa provenía de su comportamiento predecible en carretera, aunque siempre se recomendaba un manejo experto debido a su potencia.
La conectividad y el sistema de audio no eran el fuerte del Viper de 1996. Su equipamiento era básico, enfocado en la experiencia de conducción más que en el entretenimiento multimedia, pero aun así contaba con radio AM/FM y un reproductor de cintas.
Los opcionales exteriores del Dodge Viper de 1996 permitían personalizar la imagen del vehículo a gusto del conductor. Entre ellos destacaban:
En el interior, se ofrecían mejoras para aquellos que deseaban un extra de confort o una estética personalizada:
Los paquetes opcionales incluían mejoras combinadas para aquellos que buscaban un nivel superior de equipamiento y personalización en su Dodge Viper.
Además, se podían adquirir accesorios como carcasas para los faros, protectores de la carrocería y sistemas de escape de alto rendimiento.
¿Estás pensando en asegurar un Dodge Viper de 1996? Aquí te damos algunas claves para que elijas el mejor seguro:
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El Dodge Viper de 1996 está equipado con un motor V10 que generalmente ofrece una cilindrada de aproximadamente 8 litros.
Dependiendo de la variante, el Dodge Viper de 1996 puede tener entre 400 y 450 cv.
La velocidad máxima del Dodge Viper de 1996 oscila entre los 250 y los 290 km/h, variando según la versión específica.
El Dodge Viper de 1996 puede acelerar de 0 a 100 km/h generalmente en alrededor de 4,5 a 5,5 segundos.
El Dodge Viper de 1996 es un vehículo deportivo que cuenta con dos asientos.
El Dodge Viper de 1996 viene con una transmisión manual de 6 velocidades.
Aunque el Dodge Viper de 1996 es principalmente un coche deportivo enfocado en el rendimiento, puede ser utilizado para el uso diario por conductores acostumbrados a manejar vehículos de altas prestaciones y que no requieran espacio adicional para pasajeros o carga.