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El BMW Serie 5 de 1997 representa una fusión de lujo y rendimiento en un paquete ejecutivo. Sus líneas elegantes y perfil deportivo destacan en cualquier carretera. Con una conducción precisa y un interior refinado, este modelo continúa la tradición de excelencia de la marca bávara, ofreciendo una experiencia de conducción inigualable y un estatus icónico.
Puedes elegir entre el seductor sedán o el espacioso touring. Cada uno con su propio carácter, ¡pero igual de guapos!
En 1997, el BMW Serie 5 seguía siendo un fuerte competidor en el mercado, ofreciendo tecnologías avanzadas y un diseño que ha envejecido sorprendentemente bien.
Desde el eficiente 520i hasta el potente M5, el Serie 5 te deja escoger tu sabor de velocidad. ¡Hay un BMW Serie 5 para cada quien!
Confort de marcha, calidad de construcción alemana y una gama de motores potentes definen al Serie 5. Es un coche que combina deportividad y elegancia.
Comodidad9,2
Seguridad9,1
Calidad/Precio9,2
Diseño9,1
Adquirir un BMW Serie 5 de 1997 es invertir en un clásico moderno. Los precios varían según el estado y el kilometraje, pero generalmente oscilan entre lo asequible para un coche usado de su calibre y lo elevado para ejemplares en condiciones excepcionales o versiones de alto rendimiento como el M5. Los costes de mantenimiento deben considerarse, ya que las piezas de alta calidad y la mano de obra especializada no son baratas. Sin embargo, la durabilidad y el estatus intemporal pueden justificar la inversión.
Las fichas técnicas del Serie 5 ofrecen un detallado vistazo a sus capacidades, con acabados que van desde lo funcional a lo suntuoso, y unas medidas que equilibran espacio y agilidad.
La gama de colores y acabados de pintura para el Serie 5 de 1997 es extensa, permitiéndote personalizar tu coche a tu gusto.
Las llantas disponibles para el Serie 5 realzan su aspecto dinámico y mejoran la experiencia de conducción. Diseños elegantes y robustos que complementan su estética premium.
El BMW Serie 5 de 1997 ofrecía un interior que destacaba por su comodidad y su elegancia funcional. Entre las características principales, encontramos:
La seguridad en el BMW Serie 5 de 1997 era una prioridad con sistemas avanzados para la época, como airbags frontales y laterales, y frenos ABS.
Aunque estemos hablando de un vehículo de finales del siglo XX, el BMW Serie 5 de 1997 ya contaba con una dotación tecnológica notable. El sistema de audio era de alta fidelidad, con opciones como:
Aunque no tenía las funcionalidades modernas de conectividad, satisfacía las necesidades de entretenimiento audiovisual de su tiempo.
Si te va el rollo de personalizar tu coche, el BMW Serie 5 de 1997 ofrecía opcionales exteriores que lo hacían aún más atractivo:
En el interior, el Serie 5 dejaba jugar con tu creatividad ofreciendo:
Los paquetes disponibles eran la guinda del pastel, incluyendo opciones agrupadas de tecnología, confort y rendimiento para que tuvieras el Serie 5 más molón de la carretera.
Además de los opcionales mencionados, el BMW Serie 5 de 1997 también podía personalizarse con:
Vamos, que podías dejar tu Serie 5 más único que un unicornio.
A la hora de calcular el seguro para un BMW Serie 5 de 1997, considera estas variables:
La gama del BMW Serie 5 de 1997 ofrece una variedad de potencias que va desde los 115 CV en los modelos básicos hasta aproximadamente los 286 CV en las versiones más potentes como el 540i.
En 1997, el BMW Serie 5 se ofrecía principalmente en dos tipos de carrocerías: la berlina tradicional de cuatro puertas y el familiar Touring de cinco puertas.
El BMW Serie 5 de ese año incluía motores con cilindradas que iban desde los 1.8 litros en los modelos de entrada hasta los 4.4 litros de los modelos más grandes y potentes.
El BMW Serie 5 de 1997 cuenta con cinco asientos. La marca es conocida por su enfoque en la comodidad y el lujo, por lo que los asientos están diseñados para ofrecer un buen soporte y comodidad incluso en viajes largos.
La velocidad máxima de los BMW Serie 5 de 1997 varía según el modelo y motorización, pero algunos modelos pueden superar los 240 km/h.
Los BMW Serie 5 de 1997 estaban disponibles con transmisiones manuales de cinco o seis velocidades y con automáticas de cinco velocidades, dependiendo del modelo y las especificaciones del motor.
Sí, el modelo más deportivo dentro de la gama del Serie 5 de 1997 era el M5, que contaba con un motor más potente y diversas mejoras en el chasis y la suspensión para una experiencia de conducción más deportiva.