El Austin Allegro, lanzado en 1973, representó una apuesta de British Leyland por un coche compacto y económico. Con su distintiva parrilla frontal y diseño “cóncavo”, fue presentado como sucesor del Austin 1100/1300. A pesar de ser criticado por su estética y rendimiento, el Allegro se convirtió en un símbolo de su era, ofreciendo una opción práctica para la familia media.
, el Austin Allegro se actualizó con mejoras mecánicas y de diseño, buscando satisfacer la demanda del mercado y mejorar su imagen.
El Allegro estuvo disponible en múltiples versiones a lo largo de su producción:
– Allegro 1100
– Allegro 1300
– Allegro 1500
– Allegro 1750
–
, el Austin Allegro se destacó por su motor transversal y suspensión Hydragas.
Comodidad8,8
Seguridad9,7
Calidad/Precio9,1
Diseño8,9
Los precios del Austin Allegro en 1973 eran competitivos dentro del segmento de coches compactos. Inicialmente, su costo era accesible para la clase trabajadora, posicionándose como una opción económica frente a sus competidores. A lo largo de los años, el valor de los Allegro ha fluctuado, convirtiéndolos en vehículos de interés para coleccionistas y aficionados a los coches clásicos británicos. Hoy en día, su precio varía dependiendo del estado de conservación, kilometraje y rareza de la versión. Modelos bien mantenidos o restaurados pueden alcanzar precios más elevados, mientras que ejemplares en condiciones mediocres se mantienen asequibles.
Las fichas técnicas del Austin Allegro detallan sus acabados y medidas, ofreciendo información vital para su mantenimiento y restauración.
El Austin Allegro se ofreció en una amplia gama de pinturas y colores, desde el tradicional blanco hasta tonos más vivos y representativos de la época, como el amarillo mostaza o el rojo Bermellón. Estas opciones permitían una personalización que reflejaba el gusto y la personalidad del propietario.
Las llantas del Austin Allegro eran un elemento distintivo que complementaba su diseño. Disponibles en diferentes estilos y tamaños, las llantas podían ser de acero estampado con tapacubos o, en versiones más deportivas y lujosas, de aleación ligera. Estas opciones contribuían a la estética global y al comportamiento dinámico del vehículo.
El Austin Allegro, lanzado en 1973, se perfiló como una innovación en comodidad y estilo para su época. Los asientos destacaron por su diseño ergonómico, considerando las largas horas de conducción. La tapicería, disponible en diversas texturas y colores, ofrecía una sensación de confort y calidad, y era fácilmente personalizable según el gusto del cliente. El Allegro incluía también el característico volante Quartic, cuadrado con los bordes redondeados, una rareza que lo diferenciaba de otros coches de su clase y que se pensaba mejoraba la manejabilidad. El diseño interior del Austin Allegro reflejaba la visión de la marca de un coche asequible sin sacrificar el confort.
A pesar de las limitaciones tecnológicas de la época, el Austin Allegro incorporaba características de seguridad básicas como cinturones de seguridad delanteros, una carrocería con zonas de deformación controlada y un diseño de interior que minimizaba riesgos en caso de colisión.
Para los estándares de la década de 1970, el Austin Allegro presentaba un sistema de audio AM/FM que suponía un extra de entretenimiento a bordo. Aunque la conectividad como la entendemos hoy no era un concepto de la época, el Allegro ofrecía a sus usuarios la posibilidad de instalar radios de coche que, en aquel tiempo, se consideraba un lujo y una forma de estar ‘conectado’ con el mundo a través de las ondas de radio. Así, el Allegro no solo proporcionaba un medio de transporte, sino también una experiencia de viaje más agradable.
En el terreno de los opcionales, el Allegro jugaba con diversos adornos exteriores para aumentar su atractivo. Desde embellecedores de rueda hasta espejos retrovisores de diferentes estilos, el cliente podía añadir un toque personal a la carrocería.
Y en el interior, ¿qué tal unos tapizados de mayor calidad o unos reposacabezas para los asientos traseros? El Allegro ofrecía estas y otras mejoras para hacer su habitáculo aún más cómodo.
¿Buscas algo más completo? El Allegro tenía paquetes que incluían varios opcionales a un precio reducido.
O simplemente escoge algunos extras sueltos para darle ese toque único a tu Allegro.
Si estás pensando en hacerte con un clásico como el Allegro, lo primero es proteger tu inversión. Calcular el seguro es pan comido. Solo tienes que rellenar unos datos y ¡tachán! Tendrás precios que van desde la cobertura básica a todo riesgo. Recuerda que, aunque sea un cochazo de los 70, el seguro es tan fundamental como los neumáticos. Y con un clásico, quién sabe, a lo mejor encuentras un precio que te haga bailar el Allegro.
El Austin Allegro ofrecía una gama de potencias que variaba entre aproximadamente 45 y 90 cv (CV), dependiendo de la versión y el motor seleccionado.
Las cilindradas del motor en el Austin Allegro iban desde los 1.1 hasta los 1.75 litros, adecuándose así a diferentes necesidades y preferencias de rendimiento.
Sí, el Austin Allegro se ofreció en varias opciones de carrocería, incluyendo sedán de dos y cuatro puertas, así como una variante familiar.
El Austin Allegro típicamente contaba con cinco asientos, ofreciendo espacio para el conductor y hasta cuatro pasajeros.
La velocidad máxima del Austin Allegro variaba en función del modelo y el tipo de motor, pero generalmente se situaba en un rango de aproximadamente 130 a 160 km/h.
Aunque el Austin Allegro no se orientó como un coche deportivo, sí hubo versiones con mejores prestaciones, como el Allegro 1750 Sport con un motor más potente y una suspensión mejorada.
El Austin Allegro utilizaba una suspensión hidrogas, una tecnología innovadora en ese momento, que ofrecía un equilibrio entre comodidad y manejo.