Modelo | Años de Producción | Motor | Potencia |
---|---|---|---|
Austin-Healey 100 | 1953-1959 | 2.6L I4 | 90-110 hp |
Austin-Healey 3000 | 1959-1967 | 2.9L I6 | 124-148 hp |
Austin-Healey Sprite | 1958-1971 | 0.9-1.3L I4 | 43-65 hp |
El Austin-Healey Roadster ha albergado diversas versiones a lo largo de su historia, cada una con su propia identidad y carácter. Entre ellas destacan:
– Austin-Healey 100: Este modelo inicial marcó el comienzo de la leyenda.
– Austin-Healey 3000: Considerado un ícono, el “Big Healey” es un clásico deseado.
– Austin-Healey Sprite: Apodado “Frogeye” por su diseño frontal distintivo y tamaño compacto.
Las características que definen al Austin-Healey Roadster son:
– Motorizaciones variadas que van desde el eficiente 0.9L al potente 2.9L.
– Una construcción que prioriza la simplicidad y la deportividad.
– Diseños exteriores que han marcado época, equilibrando la elegancia británica con líneas agresivas.
– Interiores que fusionan el confort con un enfoque puesto en la experiencia de conducción.
Comodidad9,5
Seguridad9,4
Calidad/Precio9,4
Diseño9,2
Los precios del Austin-Healey Roadster varían considerablemente dependiendo del modelo, año y estado del vehículo. Coches restaurados pueden alcanzar cifras significativas en subastas especializadas.
Las fichas técnicas de los Austin-Healey Roadster reflejan su enfoque deportivo con detalles sobre el rendimiento del motor, las opciones de acabado y las dimensiones precisas de cada modelo.
El Austin-Healey Roadster se ofrecía en una variedad de pinturas y colores que resaltaban su estética clásica y deportiva.
Las llantas del Austin-Healey Roadster no eran solo un componente funcional, sino que formaban parte integral de su identidad estética. Los modelos 100 y 3000 generalmente venían con rines de acero con tapacubos decorativos, mientras que en variantes más deportivas o de ediciones especiales se encontraban opciones de llantas de radios de alambre, añadiendo un nivel superior de elegancia y estilo. Las dimensiones de las llantas variaban según el modelo y el año, diseñadas para complementar la capacidad de manejo y el rendimiento general del vehículo. En el mercado de coleccionistas, las llantas originales son altamente valoradas y contribuyen significativamente al valor general del coche.
El interior del Austin-Healey Roadster refleja un equilibrio entre lo clásico y lo funcional. Sus asientos deportivos ofrecen un soporte cómodo y ergonómico, envueltos en tapicerías de alta calidad que resisten el paso del tiempo. El cuidado en los detalles y acabados denota la artesanía de la época, creando un ambiente único que invita a disfrutar de cada trayecto como si fuera un viaje en el tiempo.
La seguridad en los Austin-Healey Roadster se centra en la robustez de su construcción y en la experiencia de conducción directa. Al carecer de los sistemas modernos de seguridad activa y pasiva, la conexión del conductor con la carretera es vital. Estructuras reforzadas, un sistema de frenos eficaz y una visibilidad panorámica eran las principales características de seguridad de estos vehículos, diseñados para ser disfrutados con precaución y habilidad al volante.
En tiempos donde la conectividad no era una palabra de moda, el Austin-Healey Roadster se centraba en la experiencia pura de conducción. No obstante, algunos aficionados optaban por instalar radios AM o sistemas de audio básicos para disfrutar de música durante sus trayectos, añadiendo así un toque de modernidad a su clásico paseo.
Aquellos interesados en personalizar su Austin-Healey Roadster podían escoger entre un abanico de opciones exteriores. Detalles como ruedas de radios de alambre, distintos tipos de capotas y colores de carrocería personalizados, barnices de alta calidad y acabados cromados eran algunos de los elementos que un cliente podría adicionar para destacar la belleza indiscutible de su roadster.
Para el interior, los opcionales incluían mejoras en los materiales de los asientos, desde cuero auténtico hasta textiles específicos para la era, volantes de madera pulida, y detalles de personalización como inscripciones o emblemas específicos. Estos toques hacían de cada Austin-Healey Roadster una pieza aún más exclusiva.
Los paquetes opcionales disponibles para el Austin-Healey Roadster permitían a los compradores mejorar la experiencia de conducción y estética del automóvil. Desde paquetes de rendimiento que incluían componentes de motor mejorados, sistemas de escape y suspensión optimizada, hasta paquetes de confort con mejor aislamiento acústico y refinamientos en la cabina, había opciones para satisfacer a los entusiastas más exigentes.
Los opcionales individualizados eran la cereza del pastel para el Austin-Healey Roadster. Se podían solicitar mejoras mecánicas como kits de carburación doble o sistemas de encendido electrónico, así como accesorios estéticos únicos, que no solo mejoraban el rendimiento sino que también incrementaban la singularidad y el valor del vehículo.
Evaluación de coberturas: esencial conocer las coberturas específicas para coches clásicos.
Comparativas de precios: buscar compañías especializadas en vehículos de colección.
Asistencia: verificar la inclusión de asistencia en carretera y eventos específicos para clásicos.
El seguro de un Austin-Healey Roadster es un elemento tan personalizado como el propio coche.
La cilindrada de los Austin-Healey Roadster varía entre aproximadamente 2600 cc y 3000 cc, dependiendo del modelo y la versión.
La potencia del motor en los Austin-Healey Roadster se sitúa en un rango de 90 a 150 cv, dependiendo de la configuración específica y el año de fabricación.
El Austin-Healey Roadster típicamente tiene 2 asientos, siguiendo el diseño clásico de un roadster deportivo biplaza.
La velocidad máxima de un Austin-Healey Roadster puede variar, pero generalmente se encuentra en el rango de 160 a 195 km/h, dependiendo del modelo y la condición del vehículo.
Los Austin-Healey Roadster comúnmente estaban equipados con transmisiones manuales de 4 velocidades, algunas versiones incluían overdrive como una opción adicional.
Los modelos de Austin-Healey Roadster se fabricaron desde principios de la década de 1950 hasta finales de la década de 1960.
Dado que los Austin-Healey Roadster son vehículos clásicos, no cuentan con las características de seguridad modernas que se encuentran en los coches actuales, como airbags o control de estabilidad.