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El Audi 80 de 1984 se presenta como un vehículo que combina funcionalidad con un diseño elegante, siendo una opción sólida en el segmento de los sedanes de gama media. Este modelo destaca por su equilibrio entre confort y rendimiento, ofreciendo una experiencia de conducción refinada y placentera. Su construcción de calidad y la atención al detalle reflejan el compromiso de la marca con la ingeniería y la innovación alemana, manteniendo su reputación de fiabilidad y durabilidad.
El Audi 80 de 1984 se ofreció en diferentes variantes de carrocería para satisfacer las necesidades de los clientes:
– Sedán: El clásico de cuatro puertas, ideal para familias y profesionales.
– Coupé: Una opción más deportiva y estilizada, dirigida a un público que busca diseño y prestaciones.
– Avant: La versión familiar con mayor espacio de carga y versatilidad.
Cada una de estas variantes mantenía la esencia del Audi 80, pero con detalles diferenciadores que atraían a distintos segmentos del mercado.
Modelo | Motorización | Equipamiento |
---|---|---|
Audi 80 CL | 1.6L | Básico |
Audi 80 GL | 1.8L | Confort |
Audi 80 GTE | 1.8L inyección | Deportivo |
El Audi 80 de 1984 presentaba una serie de características generales que lo hacían destacar:
Comodidad9,1
Seguridad9,1
Calidad/Precio9,1
Diseño9,1
El precio del Audi 80 de 1984 variaba según la versión y el nivel de equipamiento. Los modelos base comenzaban en un rango asequible para un sedan de su clase, mientras que las versiones más equipadas, como el Audi 80 GTE, se situaban en un segmento de precio superior debido a su mayor rendimiento y características adicionales. La relación calidad-precio era un fuerte argumento de venta de la marca, ofreciendo una buena inversión a largo plazo dada la durabilidad y fiabilidad de sus vehículos. Los precios competitivos junto con su atractivo diseño y prestaciones, hicieron del Audi 80 una opción popular en el mercado automovilístico de los años 80.
Las fichas técnicas del Audi 80 de 1984 detallan información valiosa como las dimensiones del vehículo, peso, capacidad del maletero y tipo de combustible. Los acabados disponibles ofrecían desde interiores de tela de alta calidad hasta opciones más lujosas con detalles en madera y cuero. Las medidas del Audi 80 eran compactas, permitiendo una conducción ágil en entornos urbanos, mientras que su habitáculo ofrecía suficiente espacio para garantizar el confort de los pasajeros.
La gama de pinturas y colores disponibles para el Audi 80 de 1984 permitía personalizar el vehículo al gusto del cliente. Con una paleta que comprendía desde tonos sobrios y elegantes, hasta colores más vívidos y llamativos, la elección del color del Audi 80 podía reflejar tanto un estilo clásico como una personalidad más audaz. La calidad del acabado y la durabilidad de la pintura eran aspectos destacados por la marca, afirmando la atención al detalle y la calidad alemana.
El Audi 80 de 1984 venía equipado con llantas de serie que complementaban su diseño. Para aquellos que buscaban un toque extra de estilo o rendimiento, existían opciones de llantas de aleación de distintos diseños y medidas. Estas llantas no solo mejoraban la estética del vehículo sino que también ofrecían beneficios en términos de manejo y reducción de peso. Las llantas eran un componente clave en la personalización del Audi 80, permitiendo a los propietarios darle un toque único a su coche.
El Audi 80 de 1984 se caracterizó por un interior donde la funcionalidad y la comodidad primaban en su diseño. Los asientos, ergonómicamente diseñados, ofrecían un soporte adecuado tanto para viajes largos como para la conducción diaria. La tapicería, disponible en diferentes materiales y tonalidades, se elegía cuidadosamente para aportar un toque de elegancia y durabilidad. Los ajustes manuales del asiento permitían encontrar la posición ideal de conducción con facilidad.
El Audi 80 no solo destacaba por su diseño y rendimiento, sino también por incorporar elementos de seguridad avanzados para su época. Estructuras de absorción de impactos y una carrocería reforzada eran parte de su armamento para proteger a los ocupantes. Además, estaba equipado con cinturones de seguridad delanteros de tres puntos y apoyacabezas, que minimizaban las lesiones en caso de colisión. La seguridad pasiva se complementaba con un sistema de frenos eficaz y, en algunos modelos, se ofrecía la opción de ABS, un avance tecnológico relevante en aquellos años.
Aunque la conectividad no era un aspecto destacado en 1984, el Audi 80 ofrecía un sistema de audio AM/FM con posibilidad de incorporar un reproductor de casetes, considerado de alta fidelidad para la época.
El Audi 80 permitía personalizar su exterior con una gama de opciones que incluían:
En el interior, los opcionales se centraban en el confort y la personalización:
Los paquetes opcionales del Audi 80 ofrecían combinaciones de equipamiento a un precio ventajoso, incluyendo mejoras en confort, rendimiento y estética tanto interior como exterior.
También se podían seleccionar elementos individuales como el techo solar eléctrico, la tapicería de cuero y una gama ampliada de sistemas de audio.
Calcular el seguro del Audi 80 de 1984 requiere considerar su valor histórico y la fiabilidad que ha demostrado a lo largo de los años. Las aseguradoras pueden valorar estos factores junto con las características de seguridad originales del vehículo.
El Audi 80 de 1984 ofrecía una gama de motorizaciones que incluían motores de 4 cilindros en línea y 5 cilindros, con cilindradas que iban desde aproximadamente 1.3 hasta 2.2 litros. Los niveles de potencia oscilaban entre los 55 CV y los 136 CV para las versiones más potentes.
La velocidad máxima del Audi 80 variaba según la motorización y configuración del vehículo, pero generalmente se encontraban en un rango que iba desde alrededor de 160 km/h hasta unos 200 km/h para las versiones más deportivas.
Sí, el Audi 80 estaba disponible tanto con transmisiones manuales de 4 o 5 velocidades, como con opciones de transmisión automática de 3 velocidades, según el modelo y las especificaciones del mercado.
El Audi 80 de 1984 venía principalmente con tracción delantera, aunque también había variantes con la tracción total quattro, reconocida por mejorar la capacidad de manejo y tracción en diversas condiciones de conducción.
El consumo de combustible del Audi 80 de 1984 variaba ampliamente dependiendo del tipo de motor y de la transmisión, pero generalmente se encontraba en un rango aproximado de 6 a 9 litros por cada 100 kilómetros, dependiendo de las condiciones de manejo y del mantenimiento del vehículo.
El interior del Audi 80 era conocido por su comodidad y calidad de construcción. Ofrecía asientos para cinco pasajeros y dependiendo de la variante, podía incluir características como aire acondicionado, elevalunas eléctricos y sistema de audio de calidad. La ergonomía y el diseño del salpicadero también eran aspectos destacados de la época.
El Audi 80 de 1984 se ofrecía en varias opciones de carrocería, incluyendo la sedán de cuatro puertas y el coupé de dos puertas. Posteriormente, también estuvieron disponibles variantes Avant (familiar) y descapotables, ampliando el rango de opciones para satisfacer diferentes preferencias y necesidades.