El Alpina Crossover destaca en el segmento premium por su compromiso entre deportividad y confort. Basándose en modelos de BMW, esta gama ha sido afinada por Alpina para ofrecer una experiencia de conducción única. Se caracteriza por incorporar motores potentes, ajustes específicos de chasis y un nivel de acabado interior que refleja la sofisticación de la marca. Los modelos Crossover de Alpina son una rara combinación de lujo y rendimiento, dirigidos a aquellos que buscan exclusividad sin compromisos.
Los modelos que define el rango Alpina Crossover tienen como base los SUVs de BMW. Entre ellos, encontramos el Alpina XD3 y el XD4, basados en los BMW X3 y X4 respectivamente. Estos vehículos preservan la esencia de la marca con un mayor enfoque hacia la deportividad y un diseño distintivo. Con una producción limitada, Alpina garantiza la exclusividad. Cada versión cuenta con ajustes específicos que mejoran la dinámica de conducción y ofrecen un mayor rendimiento en todos los aspectos.
Comodidad9,1
Seguridad9,1
Calidad/Precio9,4
Diseño9,2
Los Alpina Crossover no solo destacan por su mecánica y confort, sino también por su diseño exterior, en especial sus llantas. Cada modelo viene con opciones de llantas que han sido cuidadosamente diseñadas para complementar y mejorar la estética y el rendimiento del vehículo. Ofrecen una variedad de diseños y tamaños, desde opciones más conservadoras hasta configuraciones más audaces que resaltan la naturaleza deportiva de estos crossovers. Estas llantas no solo mejoran la estampa visual del coche, sino que también están optimizadas para ofrecer una mejora en la conducción y en la respuesta del vehículo al terreno.
La cabina del Alpina Crossover está diseñada para ofrecer confort y lujo, siendo el habitáculo una clara muestra de la maestría artesanal de la marca. Los asientos están elaborados con materiales de alta gama y ofrecen opciones de ajuste eléctrico para garantizar una posición óptima de conducción. Entre sus características se destacan:
El Alpina Crossover prioriza la seguridad mediante avanzados sistemas de asistencia al conductor, incluyendo control de tracción, múltiples airbags y tecnología de mitigación de colisiones.
Equipado con la última tecnología, el Alpina Crossover dispone de un sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil, conectividad Bluetooth y un sistema de audio premium para una experiencia acústica excepcional.
El Alpina Crossover ofrece una gama de opcionales exteriores que incluyen ruedas de diseño exclusivo, paquetes aerodinámicos y una selección personalizada de colores de pintura.
Los opcionales interiores destacan por su personalización, con variaciones en acabados de madera o fibra de carbono, volantes calefactables y sistemas de iluminación ambiental.
Los paquetes opcionales para el Alpina Crossover están diseñados para realzar el carácter deportivo y de lujo, incluyendo mejoras en rendimiento, confort interior y distintivas firmas visuales de la marca.
En un nivel más exclusivo, el Alpina Crossover ofrece detalles como sistemas de entretenimiento para asientos traseros y asistentes de conducción semiautónomos.
La potencia del motor de los modelos Alpina Crossover varía entre 250 y 450 CV, dependiendo de la variante específica y el año de fabricación.
Los modelos Alpina Crossover ofrecen motores con cilindradas que oscilan entre 2.0 y 3.0 litros, ajustándose a las diferentes necesidades de rendimiento.
El Alpina Crossover cuenta típicamente con 5 asientos, proporcionando un equilibrio entre comodidad y espacio para pasajeros.
La velocidad máxima de los Alpina Crossover puede variar, pero suelen situarse en un rango entre 220 y 260 km/h, dependiendo de la versión y configuración del motor.
El Alpina Crossover está equipado generalmente con una transmisión automática de 8 velocidades, aunque las especificaciones pueden variar según el modelo y el año.
Sí, muchos de los modelos Alpina Crossover cuentan con tracción integral (AWD) para mejorar la capacidad de manejo y la seguridad en diversas condiciones de conducción.
Sí, el Alpina Crossover suele incorporar varios sistemas de asistencia a la conducción como parte de su equipamiento estándar o disponible, lo que incluye elementos como control de crucero adaptativo, asistentes de mantenimiento de carril y reconocimiento de señales de tráfico.